Partido Socialismo y Libertad (PSL)
El pasado domingo 20 de mayo se consumó un nuevo fraude electoral por parte del gobierno y el CNE. Como la mayoría del pueblo ya se imaginaba, Nicolás Maduro fue reelegido presidente del país. No hubo sorpresas.
La jornada electoral se caracterizó por un ausentismo total de votantes. Numerosas imágenes y videos que circularon ese día por las redes sociales, evidenciaron la desolación en las calles y centros de votación. La gente no salió a votar, a pesar de las presiones, de la persecución en los organismos públicos, del chantaje con los bonos, el “carnet de la Patria” y las cajas Clap. El pueblo se rebeló contra la intimidación del gobierno.
La altísima abstención demuestra que el pueblo trabajador, en su gran mayoría, está en contra del gobierno. Esto plantea con claridad que hay condiciones para salir a la lucha. Se hizo manifiesto a través de la abstención masiva, el repudio a un gobierno que nos mata de hambre, que reprime y entrega la soberanía nacional, encubierto por un discurso de falso socialismo.
El pasado domingo 20 de mayo se consumó un nuevo fraude electoral por parte del gobierno y el CNE. Como la mayoría del pueblo ya se imaginaba, Nicolás Maduro fue reelegido presidente del país. No hubo sorpresas.
La jornada electoral se caracterizó por un ausentismo total de votantes. Numerosas imágenes y videos que circularon ese día por las redes sociales, evidenciaron la desolación en las calles y centros de votación. La gente no salió a votar, a pesar de las presiones, de la persecución en los organismos públicos, del chantaje con los bonos, el “carnet de la Patria” y las cajas Clap. El pueblo se rebeló contra la intimidación del gobierno.
La altísima abstención demuestra que el pueblo trabajador, en su gran mayoría, está en contra del gobierno. Esto plantea con claridad que hay condiciones para salir a la lucha. Se hizo manifiesto a través de la abstención masiva, el repudio a un gobierno que nos mata de hambre, que reprime y entrega la soberanía nacional, encubierto por un discurso de falso socialismo.
En las semanas previas a las elecciones era claro que no había ningún interés en las mismas. Para el pueblo y los trabajadores la preocupación fundamental era y sigue siendo el hambre que campea por las ciudades y pueblos, los salarios miserables, la destrucción del transporte, casi paralizado, el sistema de salud en crisis total y la educación por el suelo. La precariedad de servicios como el telefónico, la luz, el agua y la recolección de basura.
Por su parte, la MUD-Frente Amplio y las demás variantes patronales, pasaron desapercibidas. Su respuesta posterior a las elecciones ha sido lamentable. Reflejan que no tienen nada que ver con los intereses populares, con las necesidades y angustias de los de abajo.
No llaman a movilizarse en las calles. Tienen un acuerdo tácito con el gobierno en no invocar la protesta popular. Su preocupación fundamental es insistir en un llamado absurdo a realizar elecciones “limpias”. Algunos le hacen coro a Falcón que planteó que se convocaran nuevos comicios para octubre. Apuestan a la presión internacional de gobiernos reaccionarios y repudiados por sus propios pueblos como el de Macri en Argentina o el de Temer en Brasil. Otros aplauden las sanciones impuestas por el imperialismo e invocan una eventual intervención militar disfrazada de “humanitaria” o azuzan a los militares a que den un golpe. No dicen nada del hambre, de los salarios destruidos, de la falta de medicinas, que son las preocupaciones esenciales del pueblo.
El Partido Socialismo y Libertad rechaza categóricamente las inaceptables intromisiones del imperialismo encabezado por Trump, y no avala ninguna aventura golpista e intervencionista. Le corresponde al pueblo trabajador venezolano resolver sus problemas. Sólo con nuestras propias fuerzas, con la movilización obrera y popular independiente, daremos al traste con este gobierno de falso socialismo que nos mata de hambre.
Las ilusiones electorales que podrían existir en algunos sectores, ya quedaron atrás. Sin embargo, sí es posible terminar con esta tragedia. Hay que desarrollar las protestas que se vienen produciendo en todo el país. Organizarnos en comunidades, universidades y centros de trabajo para protestar por nuestras reivindicaciones y contra el gobierno.
Este es un gobierno débil, sumido en una profunda crisis que se acrecentará más después de los resultados electorales. Las contradicciones a su interior van a aumentar. Los pases de factura entre funcionarios estarán a la orden del día, y esto se reflejará al interior de los cuerpos de seguridad.
Hay un espacio importante para impulsar la protesta popular independiente de los partidos patronales
Los trabajadores universitarios comienzan a movilizarse por sus salarios y reivindicaciones. Hay que seguir el ejemplo de los trabajadores del sector salud que ya realizaron una jornada nacional de protesta. A esta acción hay que darle continuidad. Fetrasalud debe convocar asambleas en los centros de salud y discutir un plan de movilización nacional. Los trabajadores eléctricos vienen protestando en Caracas, exigiendo la discusión de su contrato colectivo. A esto hay que darle continuidad. Los del Seguro Social salieron a protestar sin miedo en Caracas. Y miles protestan todos los días en las comunidades por agua, luz y comida.
Cada sector social debe organizarse, discutir acciones en asamblea y salir a la calle a protestar. Si estamos unidos en la miseria por qué no unirnos en la lucha. Solo con la unidad y la participación masiva podemos enfrentar al gobierno y sus “colectivos”. Es necesario realizar acciones como piquetes, cortes de calle, marchas y volanteos. Hay que ir articulando las protestas en jornadas regionales y sectoriales. Avanzar en la articulación y unificación de todas esas luchas. Proponemos la conformación de un comité o coordinación de luchas que comience regionalmente y se desarrolle a escala nacional.
Luchemos por un Plan Económico Popular
El Partido Socialismo y Libertad llama a todo el pueblo trabajador a luchar por un Plan Económico que contemple un plan de producción e importación masiva de alimentos y medicinas; por un aumento de salario que lo equipare a la canasta básica, y que se ajuste mensualmente de acuerdo a la inflación; suspensión inmediata de los pagos de la deuda externa; que el petróleo sea 100% estatal, sin empresas mixtas ni transnacionales, gestionado por trabajadores, profesionales y técnicos de Pdvsa, por la confiscación de los bienes de los corruptos de Pdvsa detenidos y de los que hicieron importaciones fraudulentas, para que esos recursos se destinen a resolver los principales problemas del pueblo; por el rescate e inversiones en las empresas básicas; por la estimulación de la producción nacional mediante una verdadera reforma agraria democrática que otorgue tierras a los campesinos pobres; por la defensa de las libertades democráticas. ¡Libertad para los presos por protestar! ¡Libertad para Rodney Álvarez! ¡Que aparezca Alcedo Mora! ¡No más tribunales militares!
¡Contra el hambre, movilización unitaria del pueblo trabajador!
¡Rebélate contra el hambre y contra el gobierno!
¡Por una Coordinación Nacional de Luchas!
[Tomado de http://deslinde2011.blogspot.com/2018/05/despues-del-fraude-si-es-posible.html.]
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