María Ramírez (Correo del Caroní)
El Ministerio de Desarrollo Minero Ecológico [¡no es chiste, así se llama!] aprobó 23 nuevas áreas para la explotación minera durante 20 años en los municipios Roscio, El Callao, Sifontes, Piar, Cedeño y Padre Pedro Chien, que estarán bajo la tutela de la Corporación Venezolana de Minería (CVM) y la Empresa Nacional Aurífera (ENA), ambos entes adscrito al despacho minero desde hace un año.
La aprobación fue publicada en la Resolución N° 0013, publicada en la Gaceta Oficial N° 41.329 del viernes 26 de enero de 2018. Parte de los yacimientos, un poco más de 35 mil hectáreas, habían sido asignados en diciembre de 2012 a la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que, en la práctica, nunca operó formalmente en la zona. Las áreas se encuentran ubicadas dentro de la Zona de Desarrollo Estratégico Nacional Arco Minero del Orinoco a lo largo y ancho del estado Bolívar y son especificadas con coordenadas y botalones en el documento oficial. La ENA, presidida por Nino Jesús Angulo Vargas, también titular de la estatal Minerven, ejercerá exclusivamente en tres zonas delimitadas en los municipios El Callao, Roscio y Sifontes, en las que tendrá el derecho a las actividades de exploración y explotación de minas y yacimientos de oro, incluyendo su aprovechamiento.
El Ministerio de Desarrollo Minero Ecológico [¡no es chiste, así se llama!] aprobó 23 nuevas áreas para la explotación minera durante 20 años en los municipios Roscio, El Callao, Sifontes, Piar, Cedeño y Padre Pedro Chien, que estarán bajo la tutela de la Corporación Venezolana de Minería (CVM) y la Empresa Nacional Aurífera (ENA), ambos entes adscrito al despacho minero desde hace un año.
La aprobación fue publicada en la Resolución N° 0013, publicada en la Gaceta Oficial N° 41.329 del viernes 26 de enero de 2018. Parte de los yacimientos, un poco más de 35 mil hectáreas, habían sido asignados en diciembre de 2012 a la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que, en la práctica, nunca operó formalmente en la zona. Las áreas se encuentran ubicadas dentro de la Zona de Desarrollo Estratégico Nacional Arco Minero del Orinoco a lo largo y ancho del estado Bolívar y son especificadas con coordenadas y botalones en el documento oficial. La ENA, presidida por Nino Jesús Angulo Vargas, también titular de la estatal Minerven, ejercerá exclusivamente en tres zonas delimitadas en los municipios El Callao, Roscio y Sifontes, en las que tendrá el derecho a las actividades de exploración y explotación de minas y yacimientos de oro, incluyendo su aprovechamiento.
El documento recuerda en el artículo 3 que los yacimientos de oro y demás minerales estratégicos incluyendo las áreas auríferas delimitadas “pertenecen a la República Bolivariana de Venezuela y son bienes del dominio público, y por lo tanto, inalienables e imprescriptibles, en relación a los cuales solo podrán ejercerse actividades primarias bajo la regulación, seguimiento, control y fiscalización del ministerio con competencia en la materia minera ecológica”.
La CVM así como la ENA atenderán al uso racional del recurso y la preservación del medio ambiente, indican, y a tal fin “darán cumplimiento irrestricto a las leyes y normas que regulan la materia; así mismo aplicarán las mejores prácticas científicas y tecnológicas, procurando la óptima recuperación o extracción nacional del recurso aurífero, respetando la conservación ambiental, la seguridad e higiene, y la ordenación del territorio”. “En las áreas delimitadas, las estatales podrán suscribir alianzas estratégicas con personas naturales organizadas en brigadas mineras, organizaciones socioproductivas, sociedades u otras formas de asociación permitidas por la ley”. El área, por cada alianza estratégica, no podrá ser mayor a 25 hectáreas.
Transfieren derecho de exploración a la CVM y ENA
Ni la CVM ni la ENA contaban hasta ahora con el derecho formal para la realización de actividades primarias, reservadas al Estado, hasta el 26 de enero cuando además de la delimitación de las áreas se hizo la transferencia del derecho a desarrollar la exploración, así como de la propiedad u otros derechos sobre los bienes muebles o inmuebles existentes en el área determinada, “los cuales son requeridos para el eficiente ejercicio de las actividades primarias, conexas y auxiliares relativas al aprovechamiento del mineral aurífero”.
La Empresa Nacional Aurífera es una compañía mixta, con una composición de 60% de las acciones propiedad de Pdvsa y 40% en poder del Banco Central de Venezuela (BCV). Los estados financieros del BCV al 31 de diciembre de 2013, indican que ENA ejercerá influencia en sus estrategias y negocios “en línea con el objetivo de fortalecer la participación en el mercado del oro”. La ENA es, en teoría, la propietaria del 100% de las acciones de Minerven desde marzo de 2015, cuando se ordenó la transferencia accionaria en poder de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG). La transferencia del derecho a desarrollar actividades primarias fue publicada en la misma Gaceta Oficial en la que se delimitan las áreas, pero en el decreto presidencial N° 3.189.
Como en concesiones a empresas mixtas, el decreto establece que la República Bolivariana de Venezuela no garantiza la existencia de oro ni de ningún otro mineral en el área determinada “y no se obliga al saneamiento. La ejecución de las actividades primarias, se efectuará a todo riesgo de quienes las realicen en lo que se refiere a la existencia de dicho mineral”. Tanto el decreto presidencial como la resolución en la que se delimitaron las áreas entraron en vigencia el 7 de diciembre de 2017.
A pocos días de visita de autoridades al sur
La publicación ocurrió días después de la visita de autoridades del Banco Central de Venezuela a El Callao y a Puerto Ordaz, en donde aspiran instalar un centro de acopio de oro. Sobre la necesidad de inversiones en la estatal Minerven, que se encuentra paralizada desde 2017, no hubo anuncios públicos. Un dirigente sindical de la estatal aurífera, que prefirió mantener su nombre en reserva, destacó que en la actualidad Minerven está siendo utilizada como centro de acopio, mientras que la producción de oro que mes a mes viaja a las bóvedas del BCV proviene de la pequeña minería. La reciente luz verde en la delimitación de zonas mineras apunta a mantener el rezago operativo de la industria, ubicada en El Callao. “Minerven no produjo ni 100 kilos de oro en el 2017 y Caratal, Revemin, Choco y Camorra están paradas. Las minas Sosa Méndez y Colombia están inundadas; la planta Isidora opera a 15% y la Simón Bolívar está parada (…) El oxígeno que necesita Minerven es inversión porque debemos empezar de cero renovando equipos que ya cumplieron su vida útil”.
Entretanto, las bóvedas y el área de fundición están siendo utilizadas como acopio de la pequeña minería que opera en plantas medianas, así como de material procesado de manera artesanal, “pero nosotros como estructura para explotar y comercializar, no lo estamos haciendo, pese a que Minerven es la única empresa en el país 100% del Estado y de gran minería”. La falta de visión coincide con la necesidad de recursos financieros rápidos y a borbotones. “El país se encuentra en una gran agitación política y financiera desde hace ya varios años, pero actualmente los niveles de hiperinflación y de escasez de productos básicos están llevando la economía a tocar fondo. El gobierno necesita soluciones concretas, por ello el anuncio de la apertura de una parte significativa del país a un nuevo motor de desarrollo económico: la minería”, sostiene Bram Ebus, periodista de investigación especializado en temas socioambientales.
[Tomado de http://www.correodelcaroni.com/index.php/economia/item/62051-aprueban-23-nuevas-areas-para-explotacion-minera-en-seis-municipios-de-bolivar.]
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