Chile: Editorial de Acracia # 82 - ¡Que no te falten huevos!

Periódico Acracia 

“No tengo un sistema que ofrecer; rechazo expresamente  la  presuposición.  El  sistema  propio del hombre sólo se conocerá al llegar la humanidad a su término... Lo que me interesa es explorar el camino que sigue, y, de ser posible, facilitarle”.
Pierre-Joseph Proudhon

Si bien la rica tendencia de  diversidad de opiniones en el mundo ácrata respecto del movimiento social acaecido en la región chilena en las últimas semanas, evidencia la vitalidad del mismo, pues en él encontramos tanto voces críticas, así como otras que lo enaltecen, aunque también se puede interpretar como falta de certidumbres. Por ello  es impostergable reflexionar sobre algunas nociones básicas orientadoras. Y es que nadie, en primer término podría no estar de acuerdo con desmantelar el aparataje neoliberal y por otro lado recuperar de algún modo las aguas, las tierras y los servicios básicos. En  segundo término nunca ningún ácrata se ha mantenido indiferente frente a tanta injusticia y la  mayoría de nosotros manteníamos una participación inorgánica realizando la mayoría de las veces un trabajo invisible, pues como todos padecemos los mismos males.

Ahora bien, de cara a las repentinas y persistentes  expresiones de solidaridad y unión del movimiento social en la región chilena, de por sí, -hayamos querido o no los anarquistas-, es antipartidista, sin líderes y horizontalista, ¿pues que mejor? Sí hasta en la prensa y los medios internacionales se destaca tan poco común característica, en algunos para denostarlo, en otros para enfatizar el hecho que no se puede negociar con un movimiento de estas características. Estamos frente a una oportunidad sin igual de profundizar una forma de organización que no éste a merced del clientelismo político, y para ello podemos volcar toda la experiencia anárquica  al respecto; no con grandes discursos sino con la elocuencia de la práctica, del ser haciendo, pues este siempre a sido el rasgo definitorio de los anarquistas; distinguirse no por la grandilocuencia de su discurso, sino por la coherencia de su práctica.

Ya vamos por un mes de lucha y dignidad, justo a tiempo para debatir y elucubrar propuestas sociopolíticas que nos permitan sobrevivir al álgido periodo de manifestaciones, pues este movimiento social tampoco se puede reducir a ello, este y otros frentes han de ser necesariamente cubiertos, pues ya tenemos claro todo lo que no queremos, faltandonos entonces consensuar y construir las propuestas para esta nueva sociedad. A pesar de que en los medios y periódicos más populares del  anarquismo en la región chilena, tie-nen un marcado discurso anticiudadano, lo cierto es que con sus páginas sólo convencen al convencido, pero difícilmente logran llegar a más personas, producto de un discurso virulento y bastante ofensivo. Por ello es prudente escuchar, asistir a las asambleas barriales o cabildos populares, para escuchar al otro, y poder así ajustar nuestros discursos, de forma tal que logren llegar más lejos entre las personas y cautivar así su conciencia e imaginación, conservando y promoviendo todo aquello que nos conduzca a mayores niveles de libertad, igualdad y hermandad.

                              Grupo Acracia

[Publicado originalmente en el periódico Acracia # 82, Valdivia, noviembre 2019. Número completo accesible en https://periodicoacracia.files.wordpress.com/2019/11/acracia82-online.pdf.]