Milton D'León
Son numerosas y extensas las colas que se observan en todas las entidades bancarias del país. No existe un banco donde no se han visto centenares de personas de la tercera edad en infernales colas para cobrar una pensión que no les alcanzará más que para un par de productos esenciales. Por retrasos de los pagos o por pagos incompletos han sido numerosas las protestas, con trancas de calle, para expresar una rabia desesperante.
Tres días de escenas desesperadas de una dimensión que no se observaba en tiempos anteriores de personas que rondan los 70 y 80 años de edad, lo que expresa en todos los niveles el agravamiento de la crisis social y económica que se vive en el país. Ya el hecho de que personas de edad avanzada tengan que aguantarse largas colas, la mayoría de las veces a pleno sol y por horas, muestra otro drama más del pueblo trabajador.
Son numerosas y extensas las colas que se observan en todas las entidades bancarias del país. No existe un banco donde no se han visto centenares de personas de la tercera edad en infernales colas para cobrar una pensión que no les alcanzará más que para un par de productos esenciales. Por retrasos de los pagos o por pagos incompletos han sido numerosas las protestas, con trancas de calle, para expresar una rabia desesperante.
Tres días de escenas desesperadas de una dimensión que no se observaba en tiempos anteriores de personas que rondan los 70 y 80 años de edad, lo que expresa en todos los niveles el agravamiento de la crisis social y económica que se vive en el país. Ya el hecho de que personas de edad avanzada tengan que aguantarse largas colas, la mayoría de las veces a pleno sol y por horas, muestra otro drama más del pueblo trabajador.
Luego de que la Superintendencia de Instituciones del Sector Bancario (Sudeban) anunciara el cobro de pensiones por terminal de número de cédula, la mayoría de las personas de tercera edad no terminaron de obtener el mencionado pago. Muchos pensionados no consiguieron cobrar su pensión, o solo pudieron retirar la mitad de lo que les correspondía.
La indignación y humillación que significa tener que esperar más de seis horas bajo el sol inclemente, sin poder ir al baño, comer o tomar algo, realmente es repugnante para personas que trabajaron toda su vida, y ahora se ven obligados a esta situación. No era casualidad que frente al desespero muchas personas declaraban: “Esa decisión del gobierno es una locura, una burla, un abuso para las personas mayores. Yo antes, en tres horas, ya había cobrado mi pensión”. A las largas colas se sumó que no todas las personas pensionadas viven cerca de la entidad bancaria, teniendo que viajar para poder cobrar, lo que agobiaba la situación. Estamos hablando de adultos mayores, que sufren de enfermedades, o que precisan hacer uso de los baños con más frecuencia y se les hace imposible soportar semejante inclemencia.
Las colas han aumentado vertiginosamente por la búsqueda o necesidad del dinero en efectivo, ya que el papel moneda escasea y es difícil de obtener, llegando a generarse mafias que “venden” el efectivo a las personas vía transferencias bancarias con porcentajes altísimos que llegan a superar el 120%. Por ejemplo, si alguien quiere obtener unos 80 mil bolívares en efectivo debe transferir 200 mil bolívares a las personas inescrupulosas que se aprovechan de la situación, una situación generada por el propio gobierno. Los pensionados por ley son los únicos que tienen el derecho de poder retirar su cobro completo en efectivo, y por eso recurrieron en masa a las entidades bancarias a retirarlo, pues les permite comprar a un precio menor productos de primera necesidad si lo hacen con efectivo a que lo hagan con pago con tarjeta de débito. Así, el obtener el efectivo les ahorra mucho dinero en los mercados de calle. Por ejemplo, medio cartón de huevos tiene un costo de Bs. 130.000 si se paga con billetes y si es con tarjeta de débito Bs. 280.000. Es una fuertísima diferencia en una situación especulativa y de crisis social.
Pero en muchas entidades bancarias del país, los pensionados no consiguieron retirar el monto completo de la pensión, como estaba estipulado por la Sudeban. Muchos solo cobraban los 300.000 bolívares de los 852.000 bolívares que les correspondía, con el argumento de las agencias bancarias que no había suficiente efectivo pues la remesa enviada al banco no alcanzaba para todos. Pensionados que les correspondió cobrar el tercer día de la jornada fueron los más perjudicados, debido a que el monto disminuyó a 500 mil bolívares en los bancos que estaban pagando completo y a 200 mil bolívares los que estaban pagando la mitad en días anteriores. En fin, una verdadera estafa.
Por esta situación humillante es que pensionados protestaron en todo el país por el pago incompleto, por no poder conseguir cobrar literalmente, o por estar cansados de esperar tantas horas por el pago del dinero que se ganaron tras años de trabajo. Esto ha generado que en muchas ciudades aumenten las trancas de calles durante los días estipulados para el cobro de pensiones. En todas estas protestas lo que más se escucha frecuentemente eran declaraciones del tipo: “Esta es una pensión que nos la ganamos con nuestro trabajo. ¿Hasta cuándo este Presidente se burla del pueblo mayor? Ya estamos cansados de aguantarle tanta humillación a Maduro”. Y tienen completa razón.
Se trata de una situación agobiante para los pensionados que a estas alturas de su vida tienen que pasar por estas situaciones. Es que la catástrofe económica y social que se vive en el país afecta con más fuerza a los más vulnerables, al mismo tiempo que el hambre y las penurias del pueblo son agobiantes y siguen aumentando, en medio de fuertes devaluaciones y una hiperinflación descontrolada que pulveriza los salarios de los trabajadores y el ingreso de los sectores populares, provocando una caída brutal de las condiciones de vida del pueblo. La realidad de todos los días es desabastecimiento, paralización de empresas, desmoronamiento de la salud, la educación, el transporte y los servicios esenciales, y las escenas vividas estos días con los pensionados del país que trabajaron toda su vida es el drama más cruel para las personas de la tercera edad.
[Versión resumida de post originalmente publicado en http://www.laizquierdadiario.com.ve/El-tormento-de-los-pensionados-venezolanos-en-tiempos-de-crisis?id_rubrique=5442.]
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos interesa el debate, la confrontación de ideas y el disenso. Pero si tu comentario es sólo para descalificaciones sin argumentos, o mentiras falaces, no será publicado. Hay muchos sitios del gobierno venezolano donde gustosa y rápidamente publican ese tipo de comunicaciones.