Prensa C-cura
El gobierno de Nicolás Maduro creó el pasado 10 de febrero, mediante el decreto 2.231, la Compañía Anónima Militar de Industrias Mineras, Petrolíferas y de Gas (Camimpeg). El texto del decreto, aparecido en la Gaceta Oficial, establece amplias competencias para dicha empresa en el área de los servicios petroleros. El secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), José Bodas, repudió la creación de la empresa y denunció los propósitos que persigue.
“Esta empresa militar de servicios petroleros está facultada para realizar desde obras de infraestructura hasta la administración de taladros, obras de mantenimiento, importaciones de insumos, una gama de actividades ligadas a la actividad petrolera en la cual los militares no tienen experiencia, pero en la que hay posibilidades de negocios muy lucrativos. Con Camimpeg el gobierno pretende seguir usando la industria petrolera para el clientelismo político, en este caso con el sector militar. Es evidente que Camimpeg puede convertirse en un mecanismo para obtener contratos de servicios y subcontratar a otras empresas”, explicó el dirigente obrero revolucionario.
El gobierno de Nicolás Maduro creó el pasado 10 de febrero, mediante el decreto 2.231, la Compañía Anónima Militar de Industrias Mineras, Petrolíferas y de Gas (Camimpeg). El texto del decreto, aparecido en la Gaceta Oficial, establece amplias competencias para dicha empresa en el área de los servicios petroleros. El secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), José Bodas, repudió la creación de la empresa y denunció los propósitos que persigue.
“Esta empresa militar de servicios petroleros está facultada para realizar desde obras de infraestructura hasta la administración de taladros, obras de mantenimiento, importaciones de insumos, una gama de actividades ligadas a la actividad petrolera en la cual los militares no tienen experiencia, pero en la que hay posibilidades de negocios muy lucrativos. Con Camimpeg el gobierno pretende seguir usando la industria petrolera para el clientelismo político, en este caso con el sector militar. Es evidente que Camimpeg puede convertirse en un mecanismo para obtener contratos de servicios y subcontratar a otras empresas”, explicó el dirigente obrero revolucionario.
Bodas recordó que la industria petrolera se encuentra en pésimas condiciones debido a la desinversión y la falta de mantenimiento, y que la única manera de revertir esta situación es atendiendo a los reclamos de los trabajadores, que sistemáticamente denuncian el deterioro y las fallas en la seguridad industrial. El dirigente sindical considera que “la creación de una empresa militar petrolera lejos de solucionar los problemas, los agravará. Pues el Estado podrá utilizar dicha empresa para tercerizar a trabajadores en condiciones más precarias, sin libertad sindical. Lo que hay que hacer es respetar la libertad sindical, permitir las elecciones libres y transparentes en la Futpv, que tiene su período vencido, respetar los derechos de los trabajadores, escuchar las denuncias que venimos haciendo desde hace varios años sobre cómo Pdvsa se cae a pedazos por la falta de inversión, y por supuesto nacionalizar la industria petrolera, sin empresas mixtas ni transnacionales ni empresas militares”.
[Tomado de http://web.laclase.info/content/jose-bodas-rechaza-la-creacion-de-empresa-militar-petrolera.]
Anexo: Un año crucial para los trabajadores petroleros venezolanos (Extracto)
Simón Rodríguez P.
Uno de los sectores obreros más castigados por la política laboral del gobierno ha sido el de los trabajadores petroleros. La contratación colectiva firmada en enero por la burocracia sindical del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) y el gobierno, establece un salario que equivale a 180 dólares mensuales a la tasa oficial (50 dólares a la tasa del mercado paralelo).
Paralelamente a la degradación de las condiciones laborales, de seguridad industrial, la destrucción ambiental y el abaratamiento acelerado de la mano de obra, ha corrido la restricción de la libertad sindical y la persecución contra los trabajadores. La utilización de militares de la Guardia Nacional Bolivariana para detener a los trabajadores combativos como el secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), José Bodas, el despido de sindicalistas revolucionarios como Bladimir Carvajal, la postergación de las elecciones sindicales, el control de los sindicatos de base mediante maniobras judiciales, son todos elementos de un ataque general contra los trabajadores petroleros.
[Ver texto completo en http://web.laclase.info/content/un-ano-crucial-para-los-trabajadores-petroleros-venezolanos.]