Núcleo Proletario Clasista (Aragua)
Por todos los medios se habla de las 9 muertes ocurridas en el Hospital Central de Maracay, Edo. Aragua, desde lo más culto a lo mas inculto conocen de la realidad.
Quienes vivieron en carne propia este hecho aparte de los familiares, fueron los médicos que atendieron a los pacientes, los médicos del Hospital Central que se atrevieron describieron la realidad en este caso concreto del hospital, dijeron que los pacientes de ambos sexos, adultos y niños habían muerto por infección bacterial, otros por temor de perder el empleo y ser acusado de conspirar contra el gobierno dijeron desconocer las causas de muerte, a todos los trabajadores del hospital se le prohibió dar declaraciones, la ministra de salud Nancy Pérez, se vio obligada a confirmar 45.745 casos de dengue, 398 casos del virus chikungunya, el doctor Rafael Arreaza denuncio ante la Defensoría del Pueblo cuestionando la cifra dada por la ministra, dijo que por cada paciente diagnosticado con chikungunya se cree hay 1.000 mas.
Por todos los medios se habla de las 9 muertes ocurridas en el Hospital Central de Maracay, Edo. Aragua, desde lo más culto a lo mas inculto conocen de la realidad.
Quienes vivieron en carne propia este hecho aparte de los familiares, fueron los médicos que atendieron a los pacientes, los médicos del Hospital Central que se atrevieron describieron la realidad en este caso concreto del hospital, dijeron que los pacientes de ambos sexos, adultos y niños habían muerto por infección bacterial, otros por temor de perder el empleo y ser acusado de conspirar contra el gobierno dijeron desconocer las causas de muerte, a todos los trabajadores del hospital se le prohibió dar declaraciones, la ministra de salud Nancy Pérez, se vio obligada a confirmar 45.745 casos de dengue, 398 casos del virus chikungunya, el doctor Rafael Arreaza denuncio ante la Defensoría del Pueblo cuestionando la cifra dada por la ministra, dijo que por cada paciente diagnosticado con chikungunya se cree hay 1.000 mas.
Lo que sí está claro es que todos los fallecidos eran proletarios y sigue sumando la cantidad de muertos por los mismos síntomas fiebre fuerte dolor de cabeza y hemorragia en barrios y urbanizaciones proletarias.
Los celebres administradores del capital los socialistas Bolivarianos gramcianos, los administradores de la plusvalía arrancada a la clase obrera venezolana, dicen que las muertes que se han producido son producto de una guerra bacteriológica del imperialismo norteamericano.
Lo cierto es que los virus y bacterias son parte del ecosistema de los seres vivos y que en determinada condiciones ambientales, se vuelven letales.
El verdadero caldo de cultivo de las infecciones virales y bacterianas es la miseria y hacinamiento a la que está sometida la clase obrera y el proletariado venezolano, en el capitalismo en la medida que va creciendo la miseria, y los sin reserva en un polo de la sociedad, en el otro polo van creciendo las ganancias del capital financiero, la banca suma ganancia cada trimestre, se van conformándo o entrando nuevas familias a los grandes grupos económicos, como el caso venezolano, los Chávez, los Cabellos, los Rojas, los Ramírez etc. entran a convivir y competir con los grupos ya existentes como los Mendoza y Cisneros por nombrar algunos, en el otro polo va creciendo y aumentado el número de desocupados, el trabajo eventual de barrer calle como el que ofrece las gobernaciones y alcaldía, sin ningún derecho laboral ni prestaciones sociales y sin equipo de seguridad se hace usual, aumentan los jóvenes a los que denominan charleros, aquellos que suben a los transportes, a las camionetas y autobuses para vender cualquier dulce o caramelo o poderse llevar cualquier cosa ya que sea de hurto o atraco. Hacer un mercado que llegue a fin de semana se aleja cada día más de las posibilidades para el proletariado, con una canasta básica en torno a 21 mil bolívares y un salario mínimo de 4.251 bs mensuales.
Los hospitales carecen de presupuesto para el mantenimiento sanitario, no hay insumos primarios para atender emergencias, a los hogares de Maracay el agua que llega por el acueducto es sucia y de mal olor.
Al llegar la lluvia aumentan los zancudos, el estado invierte y gasta miles y millones de bolívares pagando a las empresas publicitarias pintando el rostro del presidente jugando beisbol, montando en tren, bus, pero no dedica un bolívar al saneamiento al embalse que suministra el agua a Maracay, ni fumigan para acabar con los zancudos y mosquitos.
La patronal y los altos funcionarios del gobierno no le temen a esta peste, de la cual son responsables siempre y cuando se mantenga en los límites de los barrios proletarios, a lo que verdaderamente le temen y se cuidan los representantes del estado capitalista, es a la organización y protesta proletaria, por esto vienen dando castigo ejemplares, aun cuando las manifestaciones de descontento no salen del marco de la institucionalidad, no permiten que esta se mantenga los aplastan rápido con represión y cárcel para que estas no se propague como germen de combate y lucha a las fabricas, tal es el caso de la mujer de 56 años de edad que fue enviada a la cárcel, en Barquisimeto Estado Lara, por dar abrigo en su apartamento a unos manifestantes que tocaron a su puerta para protegerse de los gases lacrimógenos y perdigones que lanzaba la guardia nacional a los estudiantes y ama de casas que protestaban por la escases y el alto costo de los artículos de primera necesidad, la mujer de nombre María Elena Uzcategui, le acusan de instigación, posesión de explosivos y daño a la propiedad, aun cuando esta mujer cercana a la tercera edad, en su hoja de vida no reposa ni tan solo una multa de transito.
Esto es el capitalismo con su forma de gobierno parlamentaria, si a la clase obrera se olvida de las enseñanzas que se le transmite en cada proceso electoral, que es manifestar su descontento haciendo grande cola callado sin apresurarse de manera muy ordenada para depositar su voto, y que luego regresas a casas a esperar que los grupos económicos resuelvan que tendencia política va a administrar sus negocios comunes, y si se le olvida esto, a los trabajadores y no están dispuesto hacer la misma cola para comprar un paquete de harina pan o le puedan atender en un hospital, o para poder comprar papel higiénico para limpiarse el culo, si no estás dispuesto a esto, por no entender el curso natural de esta economía capitalista, donde quien decide es el mercado, donde los empresarios y la patria necesitan obtener más ganancia, llevando esos productos al mercado internacional, y que la inversión en salud por ahora no es prioritaria ya que no es rentable la inversión en salud pública, y si además de eso los trabajadores abandonan la cola, para manifestar descontento por bajos salarios, allí están muy presto y diligentes los Diputados, Gobernadores, Concejales y Presidentes con sus atribuciones para lo que fueron elegidos para someter a la clase obrera, como el caso del obrero Rodney Alvarez de Ferrominera que lleva 3 años preso sin que se le abra juicio, los tres obreros encarcelados de Sidor por luchar por la contratación colectiva. Este es el verdadero rostro del capitalismo del gobierno venezolano, y ante esta situación, no existe remedio casero, sino aquella vieja consigna revolucionaria: O La lucha O LA MUERTE.
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