Miguel Tauro
Hemos estado con nuestro médico generalista, para renovar nuestra receta por otros tres meses, y porque Susana tiene mucho dolor de columna. Bueno, felizmente no era grave, en septiembre podremos viajar, sin falta.
Hemos estado con nuestro médico generalista, para renovar nuestra receta por otros tres meses, y porque Susana tiene mucho dolor de columna. Bueno, felizmente no era grave, en septiembre podremos viajar, sin falta.
El Dr. Lespagnol (así se apellida) trató primero de averiguar por quien habíamos votado. "¿Votaron bien o no votaron?". Yo le respondí "no se si bien o mal, pero sí hemos votado". "Ah, porque casi todos los latinoamericanos votaron por Melenchon", añadió el Dr. "Es mi hijo quien votó por Melenchon, nosotros no", agregué.
De ese breve intercambio siguió el examen a Susana, luego a mi. Ya sentados frente a él, para que formule las recetas y nos cobre las consultas, y casi cuando nos estábamos yendo, mi curiosidad me condujo a mencionar a la candidata Marine le Pen. Quería tener el corazón neto respecto a las inclinaciones de nuestro "médico referente".
"¿Qué opina -le pregunté- sobre la promesa de la Le Pen de revalorizar la pensión mínima (que se recibe a partir de los 65 años) pero bajo la condición de que uno tenga la nacionalidad francesa, o por lo menos 20 años de residencia en este país?". "Estoy de acuerdo -afirmó Lespagnol- porque es un abuso que un africano venga y a los dos o tres años perciba esa pensión, mientras un francés trabaja toda su vida".
Mi respuesta fué inmediata: "pero si no se le da nada a una persona tan anciana, asi haya transcurrido un mes de su regularización como residente, ¿de qué va a vivir?. Y si además se le niega la Ayuda Médica, la Alocación para la vivienda, y todo el daño que esta mujer les prepara, ¿cómo se llama todo eso?". Lespagnol terminó justificándose con el argumento nacionalista de que "la Francia no podía ocuparse de quienes vienen d'ailleurs (de otros mundos"). Y yo finalicé, recordándole que todo habría también que hacerlo por "Humanidad", pero lo que pasa es que "esa Señora es fascista".
He aquí el centro del problema: esta corriente política crea un conflicto artificial, fundado exclusivamente en el dinero, entre la Condición Nacional y la Condición Humana.
Mucha de esta gente, electores de la extrema derecha, es decir, quizás 7 u 8 millones de franceses, rechaza la crueldad ejercida contra los animales, militan en asociaciones con ese sentido, repudian a las familias que durante las vacaciones abandonan a decenas de miles de perros y gatos en las carreteras, apoyan las sanciones contra los mataderos que incluyen la tortura en el sacrificio de bovinos, ovinos, porcinos y aves que comemos, destinan buena parte de su presupuesto a la alimentación, la higiene, la salud y el cuidado de sus mascotas, y, sin embargo, cuando se trata del empleo, la recepción, la regularización, la educación, la salud, la protección, la libertad, la relación social, el respeto de la religión, la Amistad y el Amor, de mas de 8 millones de inmigrantes, refugiados y franceses que no contamos con nombres, ni apellidos de consonancia gala, quienes tenemos el Derecho de que se nos reconozca como Seres Humanos, con Derecho Primordial a la Vida, tanto como los animales, se levanta contra nosotros una muralla de incomprensión, exclusión, inseguridad, miedo, odio, inferiorización, algo asi como un APARTHEID, cuyas consecuencias son tan graves que podrían derivar en un nuevo Genocidio.
La Sra. Le Pen se presenta demagógicamente como "la candidata de los pobres", "adversaria de los ricos", pero "¿No saben que los trabajadores y familias inmigrantes, en Francia, SON POBRES ENTRE LOS POBRES?. ¿Qué jueguito es ese de empujar unos pobres contra otros pobres, agitando la bandera francesa a manera de un mago que saca conejos de su tarro?. ¿Quiénes salen ganando de esta pseudo rivalidad?. ¿No son acaso los ricos, que ella, como Melenchon, eluden de presentar como una clase explotadora y opresora que tiene el poder en Francia, que eso se llama CAPITALISMO, para mencionar y señalar "la Finanza", solamente, como el enemigo a erradicar?. ¿No era ese el discurso de Hitler, no les falta sólo vincular la finanza con los perversos "judíos", para terminar igualándose a los nazis?.
Yo creo que lo que pasa es que el sistema ha colapsado, que es inapto para cubrir las necesidades elementales de todos los seres humanos, que la agonía ecológica del Planeta promete olas cada vez mas inmensas de "refugiados climáticos, y políticos", que se seguirán construyendo muros y que la Europa seguirá siendo una fortaleza inexpugnable, que para lo único que sirven estos políticos electoralistas, es para edificar MUROS MENTALES, e impedir, por medo de la dispersión de las fuerzas populares, y su brutal represión, que se produzca el Verdadero Cambio de Sistema, que, en las condiciones actuales y venideras, no puede ser otro que la DECISION DE COMPARTIR LO POCO QUE TENEMOS, LO POCO QUE NOS VAYA DANDO UNA TIERRA CULTIVABLE EMPOBRECIDA, Y LO MUCHO QUE COSECHEMOS CUANDO EL HOMBRE Y LA MUJER; YA LIBRES; TRABAJEN SIN AMOS NI PATRONES, SIN MURALLAS RACISTAS DIVISORIAS, IGUALES EN OPORTUNIDADES Y EN EL GOCE DE LA EXISTENCIA.
Llámese a este sistema "socialista", "anarquista", "cooperativista", "mutualista", "libertario", "sindicalista", "igualitarista", "comunitario", poco interesa. Lo mas importante hoy es desenmascarar la codicia y el odio, sean de derecha o de izquierda.
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