Daniel Arzola
Ser joven en Venezuela en la última década implica vivencias, lenguajes y adaptaciones que difícilmente otro joven latinoamericano entienda, a excepción de los cubanos. Desde evitar salir de noche, acostumbrarte a pasar horas sin electricidad, hasta no sacar el teléfono en la calle. Hemos aprendido una serie de comportamientos para sobrevivir. Pero hay algo que todos los venezolanos parecemos tener presente cada día, desde las calles hasta nuestras casas: el dinero no alcanza y el futuro cada vez parece costar más.
Cuatro jóvenes de distintas partes del país me contaron el comportamiento de su vida económica en la Venezuela actual. Surge de este modo aquella reiterativa pregunta que no deja de resonar en los hogares y calles venezolanas: ¿Y a ti para qué te alcanza el sueldo?
Luis Castillo, 19 años, Guarenas
«Actualmente trabajo como teleoperador. Estudio sociología. Hace cuatro meses que trabajo y cobro actualmente 5.200 bolívares netos mensuales (con deducciones por ley). De esos 5.500 Bs., 2.500 mensuales los gasto en transporte por vivir fuera de Caracas. Comprar material universitario (guías, libros, impresiones, copias), comer cuando no hago comida en casa, quizá una salida al cine o al teatro al mes, sin comprar muchas cosas, es casi imposible hacerlo como lo hacía antes. Para ropa tengo que juntar las quincenas a duras penas y poder comprar una camisa o pantalón, tratando de no enfermarme porque las medicinas se llevarían todo el sueldo y conseguirlas es toda una proeza. ¿Ahorrar? Las pocas remesas de mis familiares cuando pueden ayudarme. Es decir, un sueldo mínimo te alcanza para las mínimas cosas de tu vida, no para vivirla.»
Itani Guillén, 21 años, Maracay
«Estudio cuarto año de medicina y sólo puedo permitirme trabajar en verano y vacaciones de diciembre. Visto que no tengo otro título, trabajo como mesera en San Jacinto, un sitio popular de comida rápida en Maracay, estado Aragua. Casi siempre por las noches, hasta horas de la madrugada. Me pagaban 1.500 bolívares semanales, lo que se traduce a 6.000 bolívares mensuales. Mis gastos son básicos: estudios, comida y transporte. Pero a pesar de la inflación y de que no tengo responsabilidad de comprar comida o pagar servicios básicos en mi hogar, el sueldo que me costó un mes de esfuerzo solo me alcanza para dos semanas de clase, siendo equitativa y selectiva a la hora de gastar mi dinero y sin darme el lujo de comprarme ropa o pagar un viaje de fin de semana ni mucho menos de ahorrar.
Es decir, mi sueldo me alcanzó solo para comprar los cartuchos de la impresora, 4 solamente, y para comprar una empanada, que hace un año costaba 15 bolívares y hoy cuesta 60. También puedo comprar la gasolina, aunque sabemos que en este país una botella de agua es más cara que un litro de gasolina. Tengo un carro que me regalaron mis padres con esfuerzo. Si tuviera que pagar pasaje no sé cómo haría. Si estudiase en una universidad privada sería imposible.»
Annakarina Cabello, 23 años, Valencia
«Soy estudiante de arte, mención diseño gráfico. Trabajo en una tienda de cosas para el hogar, medio tiempo. Yo estoy trabajando desde los 17 años, así que estoy familiarizada con ello. Gano el sueldo mínimo, es decir 4.800 bs. Y eso solamente cubre gastos de la mitad de los materiales de la universidad y el pasaje. El resto de mis necesidades, como alimentos, ropa, calzado, la universidad privada, el pago del semestre de la universidad, me las costea mi mamá. Tengo que viajar todos los días al menos hora y media, vivo lejos de la universidad. No podemos pagar una residencia de estudiantes porque cuesta prácticamente lo mismo que gano. He tenido que vender muchas de mis cosas en muchos momentos para poder continuar.»
Diego Martínez, 25 años, Caracas
«Estoy trabajando desde los 15 años aproximadamente por ahí cuando el sueldo mínimo eran como 400 bolívares ¿Qué loco no? Y todavía podías pagar algunas cosas. En mi casa todos trabajamos y no alcanza para nada. Estudio en una universidad privada, la pagamos entre todos, yo sólo no podría. Estoy por graduarme como comunicador social. Yo pienso que todos en mi familia se gradúan conmigo. Gano 7.000 bs entre sueldo y comisiones en una agencia de bienes raíces.
Tengo ya dos años trabajando ahí. Sólo puedo comprar ropa una vez al año y siempre lo esencial. Enfermarse es una odisea. Lo que ganas no alcanza para mucho y si consigues las medicinas, bueno, ese ya es otro cuento. Mi sueldo sólo da para complementar una parte de la comida de casa y para sacar copias y pagar el metro. Un pasaje de avión para Argentina por ejemplo son 12 veces mi sueldo. ¿Vacaciones? Mira, no sé cómo hace el resto.»
Para el 1 de febrero se espera que el sueldo mínimo sea de aproximadamente 5.600 bs. Esas cifras basadas hoy día en el dólar paralelo (178 bs. según Dolartoday) equivalen a 31 dólares mensuales aproximadamente, el más bajo en la historia del país.
¿Qué le depara el 2015 a la economía venezolana? Es una pregunta que sigue despertando más que inquietud en millones de venezolanos.
[Tomado de http://eltoque.com/blog/mi-sueldo-en-venezuela.]
Ser joven en Venezuela en la última década implica vivencias, lenguajes y adaptaciones que difícilmente otro joven latinoamericano entienda, a excepción de los cubanos. Desde evitar salir de noche, acostumbrarte a pasar horas sin electricidad, hasta no sacar el teléfono en la calle. Hemos aprendido una serie de comportamientos para sobrevivir. Pero hay algo que todos los venezolanos parecemos tener presente cada día, desde las calles hasta nuestras casas: el dinero no alcanza y el futuro cada vez parece costar más.
Cuatro jóvenes de distintas partes del país me contaron el comportamiento de su vida económica en la Venezuela actual. Surge de este modo aquella reiterativa pregunta que no deja de resonar en los hogares y calles venezolanas: ¿Y a ti para qué te alcanza el sueldo?
Luis Castillo, 19 años, Guarenas
«Actualmente trabajo como teleoperador. Estudio sociología. Hace cuatro meses que trabajo y cobro actualmente 5.200 bolívares netos mensuales (con deducciones por ley). De esos 5.500 Bs., 2.500 mensuales los gasto en transporte por vivir fuera de Caracas. Comprar material universitario (guías, libros, impresiones, copias), comer cuando no hago comida en casa, quizá una salida al cine o al teatro al mes, sin comprar muchas cosas, es casi imposible hacerlo como lo hacía antes. Para ropa tengo que juntar las quincenas a duras penas y poder comprar una camisa o pantalón, tratando de no enfermarme porque las medicinas se llevarían todo el sueldo y conseguirlas es toda una proeza. ¿Ahorrar? Las pocas remesas de mis familiares cuando pueden ayudarme. Es decir, un sueldo mínimo te alcanza para las mínimas cosas de tu vida, no para vivirla.»
Itani Guillén, 21 años, Maracay
«Estudio cuarto año de medicina y sólo puedo permitirme trabajar en verano y vacaciones de diciembre. Visto que no tengo otro título, trabajo como mesera en San Jacinto, un sitio popular de comida rápida en Maracay, estado Aragua. Casi siempre por las noches, hasta horas de la madrugada. Me pagaban 1.500 bolívares semanales, lo que se traduce a 6.000 bolívares mensuales. Mis gastos son básicos: estudios, comida y transporte. Pero a pesar de la inflación y de que no tengo responsabilidad de comprar comida o pagar servicios básicos en mi hogar, el sueldo que me costó un mes de esfuerzo solo me alcanza para dos semanas de clase, siendo equitativa y selectiva a la hora de gastar mi dinero y sin darme el lujo de comprarme ropa o pagar un viaje de fin de semana ni mucho menos de ahorrar.
Es decir, mi sueldo me alcanzó solo para comprar los cartuchos de la impresora, 4 solamente, y para comprar una empanada, que hace un año costaba 15 bolívares y hoy cuesta 60. También puedo comprar la gasolina, aunque sabemos que en este país una botella de agua es más cara que un litro de gasolina. Tengo un carro que me regalaron mis padres con esfuerzo. Si tuviera que pagar pasaje no sé cómo haría. Si estudiase en una universidad privada sería imposible.»
Annakarina Cabello, 23 años, Valencia
«Soy estudiante de arte, mención diseño gráfico. Trabajo en una tienda de cosas para el hogar, medio tiempo. Yo estoy trabajando desde los 17 años, así que estoy familiarizada con ello. Gano el sueldo mínimo, es decir 4.800 bs. Y eso solamente cubre gastos de la mitad de los materiales de la universidad y el pasaje. El resto de mis necesidades, como alimentos, ropa, calzado, la universidad privada, el pago del semestre de la universidad, me las costea mi mamá. Tengo que viajar todos los días al menos hora y media, vivo lejos de la universidad. No podemos pagar una residencia de estudiantes porque cuesta prácticamente lo mismo que gano. He tenido que vender muchas de mis cosas en muchos momentos para poder continuar.»
Diego Martínez, 25 años, Caracas
«Estoy trabajando desde los 15 años aproximadamente por ahí cuando el sueldo mínimo eran como 400 bolívares ¿Qué loco no? Y todavía podías pagar algunas cosas. En mi casa todos trabajamos y no alcanza para nada. Estudio en una universidad privada, la pagamos entre todos, yo sólo no podría. Estoy por graduarme como comunicador social. Yo pienso que todos en mi familia se gradúan conmigo. Gano 7.000 bs entre sueldo y comisiones en una agencia de bienes raíces.
Tengo ya dos años trabajando ahí. Sólo puedo comprar ropa una vez al año y siempre lo esencial. Enfermarse es una odisea. Lo que ganas no alcanza para mucho y si consigues las medicinas, bueno, ese ya es otro cuento. Mi sueldo sólo da para complementar una parte de la comida de casa y para sacar copias y pagar el metro. Un pasaje de avión para Argentina por ejemplo son 12 veces mi sueldo. ¿Vacaciones? Mira, no sé cómo hace el resto.»
Para el 1 de febrero se espera que el sueldo mínimo sea de aproximadamente 5.600 bs. Esas cifras basadas hoy día en el dólar paralelo (178 bs. según Dolartoday) equivalen a 31 dólares mensuales aproximadamente, el más bajo en la historia del país.
¿Qué le depara el 2015 a la economía venezolana? Es una pregunta que sigue despertando más que inquietud en millones de venezolanos.
[Tomado de http://eltoque.com/blog/mi-sueldo-en-venezuela.]
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