Opinión: Estado comunal, la mentira de una nueva panacea...

Por Francisco López

El tema de las comunas por todo lo que implica, no es un simple tema a tratar, es el tema, y en lo personal lo considero de vital importancia.  La división político-territorial de un Estado, en esencia, influye sustancialmente en la calidad de vida, en el cómo se relacionan entre sí sus ciudadanos y hacia donde quieren ir, en consecuencia, creo pertinente desglosar un poco el tema de las Comunas, como una supuesta propuesta alternativa al "Estado Burgués" para analizarlo en profundidad, ya que me surgen mucha dudas respecto a su viabilidad y pertinencia, como supuesta panacea para resolver estructuralmente todos los problemas de funcionamiento del Gobierno, de la participación popular, de la República toda.

Es precisamente uno de los principales problemas que impiden el desarrollo sostenible de nuestro país, la irracional estructura que posee el Gobierno actual, el cual está integrado por macro estructuras corporativas que se vinculan de forma muy ineficiente entre ellas, y que, debido a un obsoleto diseño organizacional, tiene profundas debilidades en cuanto a sus lineamientos estratégicos y operativos, lo que las hace orgánicamente inservibles, inoperantes y difícilmente gestionables. Ante esta falla estructural evidente, en vez de adelantar una iniciativa seria para implantar ajustes que permitan optimizar su funcionalidad, se propone conformar una estructura paralela, completamente distinta, que prácticamente repite todos los fallos del diseño organizacional actual de la estructura existente, pero que ahora transferirá las "culpas" de su inoperancia, al pueblo!

¿Cual es, según la leyes que la definen, el objetivo de las Comunas? Prácticamente asumir todas las funciones del Gobierno a nivel local y regional, desde la planificación de las políticas públicas (prácticamente todas ellas) hasta definir mecanismos para impartir justicia de paz! Imagínense las implicaciones que esta propuesta tiene para el desarrollo de la vida de todos los ciudadanos...

El concepto de las comunas y sus estructuras, tal y como están planteadas, desde el análisis técnico-organizacional (que no técnico-político), ha sido concebido partiendo de una visión muy atrevida y optimista de una sociedad inexistente, contando con que todos los habitantes de la Comuna, así como de los integrantes de su Consejo Consultivo, su Parlamento y demás instancias que conforman su dirección, poseen de facto, habilidades excepcionales y hasta virtuosas condiciones que les facultan para decidir respecto a todo lo público. La propuesta de las Comunas tal y como está planteada, tira por tierra casi todas las funciones medulares de todos los poderes constituidos del Estado-Nación, pues la Ley, pretende darle a la Comuna facultades de legislador, de ejecutor del presupuesto público, entre otras, dejando virtualmente inservibles a las Instituciones existentes.

Ahora bien, surgen interrogantes como por ejemplo: ¿Quién evaluará objetivamente la idoneidad y la pertinencia técnica de dichas decisiones tomadas en el seno de una instancia inorgánica como la Comuna? porque, cuando esas decisiones se toman dentro de las instituciones constituidas, hay una estructura legalmente constituida, con sus correspondientes mecanismos regulatorios que permiten hacer seguimiento y control, así como una valoración y la correspondiente sanción (de ser el caso) a los responsables de las decisiones tomadas. Pero ¿y en la Comuna, cómo funcionarán esos mecanismos regulatorios y de control sí, hasta el ámbito de acción de la Comuna, es tan ambiguo, que ni siquiera tiene una territorialidad bien definida?

La Comuna según ha sido propuesta en la Ley, también es una instancia abstracta desde el punto de vista de su ámbito de acción territorial, conformada por un número desconocido de personas "reunidas" de forma "asamblearia" y articuladas a través de otras micro instancias inorgánicas como los Consejos Comunales, otras asociaciones civiles y colectivos populares que a su vez, están integradas por personas de las comunidades que tendrían que contar con el tiempo suficiente para dedicarse a este tipo de actividades, demandantes por demás. Ahora bien, la función pública demanda, cuando menos, exclusividad y dedicación, amén de la cualificación técnica y académica según el cargo o responsabilidad que se ocupe, dada la importancia que tiene el manejo de la cosa pública y la alta responsabilidad que ello conlleva. ¿Se ha previsto que los miembros de las Comunas sean funcionarios pagados, con beneficios laborales y sociales conforme a las leyes? Otorgarle facultades a una instancia como la Comuna, para la definición de las políticas públicas y que la misma pase además a regir prácticamente todos los aspectos de la vida misma, requiere sine quanom, una estructura organizativa ajustada primeramente, a las condiciones sociopsicológicas de desenvolvimiento del ser humano, al determinismo geográfico y a nuestras necesidades como sociedad.

Según los documentos que la proponen, pasando por el estamento jurídico sobre el cual se soporta toda esta propuesta, el objetivo es que las personas cuenten con una estructura "de gobierno popular" que permita a los ciudadanos organizarse y de hecho, traducir sus decisiones en acciones, con la administración directa de recursos públicos incluidos. Esta instancia ya la tenemos con las Alcaldías, son los Consejos Municipales y los Concejos Locales de Planificación Pública. Además, para hablar de políticas públicas, fundamental es pensar en la planificación de las políticas públicas. La planificación cómo muchos saben, tiene diversos niveles de estructuración según el ámbito y alcance de los planes, en lo territorial, en lo económico, en lo social, etc. Según la estructura propuesta, son las Comunas las llamadas a planificar respecto a todo y de forma imperativa, sin embargo, no está definido en la Ley de las Comunas, los límites de esa planificación.  ¿Cual mecanismo de micro planificación local más eficiente que los que proveen los CLPP, aportaría la Comuna? Los Concejos Comunales tienen una estructura que los hace virtualmente inauditables, desde el punto de vista de la técnica de gestión y la contabilidad, por cuanto sus integrantes, sus decisiones y sus manejos, están definidos a través de un mecanismo muy débil en lo jurídico, la Asamblea!  Un proyecto que nace del seno de un CC, no lleva una hoja de ruta, un sistema de verificación, de controles, más allá de algunos requisitos (muy escuetos, por cierto) requeridos por los organismos que erogan los recursos al CC que los requiere... Se reúnen algunos ciudadanos, deciden empíricamente y ya! Nadie comprobará de forma sistemática la pertinencia científico-técnica, el sustento jurídico, la vinculación con otros proyectos, ni su real influencia en el desarrollo de la comunidad... Fundamentalmente a esta debilidad se deben los inmensos problemas operacionales que tienen los CC en la actualidad.

Las múltiples instancias concebidas para dar forma a la Comuna, son tan diversas y tan débiles desde el punto de vista funcional, que organizacionalmente hablando, es muy poco factible que puedan interactuar y operar de forma sincronizada, tal y como esperarían sus proponentes. Los requisitos para formar parte de una instancia de Dirección en la Comuna, los cumple prácticamente cualquier ciudadano mayor de edad. ¿El que un ciudadano sea probo, lo hace técnicamente hábil para evaluar y aprobar un proyecto o un crédito? Pretender darle tantas atribuciones a instancias asamblearias, demandará de los miembros de los organismos directivos de las Comunas, cuando menos, un proceso de capacitación formal previo, respecto a todas las áreas de conocimiento involucradas, para que puedan asumir, con ética profesional, las responsabilidades que les sean asignadas. ¿Se ha considerado que una instancia organizacional de estas características, demanda un marco normativo y jurídico de mucho detalle, además de una infraestructura adecuada, con sus correspondientes equipos de apoyo, logística y presupuesto propio para poder funcionar?

Me resulta tan débil y absurdamente compleja la propuesta de las Comunas en su esencia y en sus formas, en lo funcional y operativo, que no me cabe duda que quién diseñó la propuesta, deliberadamente o por omisión, está apuntando al rotundo fracaso de las mismas en el inmediato plazo, envolviendo a los que se involucren, en un conflicto permanente que solo degenerará en un desgaste de energías y recursos... Pareciera que existe el deseo de trasladar la "culpa" de los fracasos del funcionamiento institucional, a la ciudadanía quién a todas luces, no podrá adelantar con éxito una sustitución anárquica de Alcaldías, Gobernaciones, tribunales, etc. Esta "propuesta" definitivamente sería innecesaria, sí las instituciones del Gobierno Nacional, Regional y Municipal, se rediseñan con una nueva visión para servir a las personas y no, para que las instituciones se sirvan de los ciudadanos!

Por último, en vista de las mentiras que ofrecen incremento de la producción con la llegada de esta nueva panacea, creo pertinente enfatizar que los ciudadanos no requieren agruparse per se, para producir. El hecho del trabajo, de la producción de bienes y servicios de forma individual o colectiva, solo demanda condiciones para que las personas puedan liberar sus potencialidades creadoras y producir.

No se crea por decreto, es un proceso que requiere "ADN" y condiciones...

Francisco Lopez

Ecologista Social, Consultor Gerencial en Organización y Métodos.

@Panchoanatemas

Extraído de Brava Palabra: http://bravapalabra.blogspot.com/2014/09/estado-comunal-la-mentira-de-una-nueva.html