Desde el pasado 12 de febrero del
presente año, toda la región de Venezuela y en especial los estados centrales y
andinos, donde la gente asqueada por los altos niveles de violencia producto de
la delincuencia (25.000 muertos solo en 2013), la escasees de bienes y
servicios (28,3%), de inflación (56%) de los pésimos servicios básicos y de un
gobierno con verborrea que solo sabe acusar a cualquier disidencia de ser
“fascista” y de “derecha” tomo las calles de forma descentralizada, sin
dirigencia y volcando toda su legitima arrechera contra la autoridad
establecida como los míticos “motines de hambre” que abundaron a inicios del
capitalismo en el viejo continente.
Pero aunque abundan los relatos,
las imágenes de represión por parte del ejército y de paramilitares del
gobierno, el movimiento anarquista ibérico en sus múltiples expresiones ha
preferido guardar un oprobioso silencio con relación a los sucesos; lo que
parece ser un saludo a la izquierda autoritaria global que hoy da gritos
histéricos ante un “golpe de derecha” que nadie puede ni podrá demostrar.
Cuando el extenso Movimiento
Libertario Español, estaba bajo el yugo del franquismo, sus afines venezolanos
brindaron apoyo, asistencia, logística y asilo a muchos inmigrantes ibéricos
que formaban parte de la CNT, FAI, FIJL y Mujeres Libres; Solo basta con
mencionar nombres como Víctor García, Pablo Benaiges, José Xena, Miguel
Campuzano, Joaquín Ascaso o Juan Cámpa, así como cientos de militantes
anarquistas consiguieron espacio en estas tierras para desarrollarse y seguir
la lucha contra el fascismo del señorito de la Coruña y sus acólitos
nacionalistas.
Desde Venezuela, se colaboro
ampliamente con dinero y logística al exilio ibérico, se cortaron relaciones
diplomáticas con la dictadura y perfiles como el de Juan García Oliver o
Germinal Esgleas se pasearon por estas costas buscando apoyo que se les brindo.
Con el advenimiento del pacto de
la Moncloa, el apoyo de los pocos libertarios de la región con sus homólogos de
la Península continuo, como parte del principio de internacionalismo y de apoyo
mutuo que albergamos en nuestros corazones. Sin embargo, esa reciprocidad
parece no existir en la actualidad.
España como productor y exportador
de armas, es el principal vendedor de equipos para la contención de la protesta
popular en Venezuela, sin importar el palabreo ideológico sin fundamento, el
gobierno español-su adversario natural- sabe que el “proceso bolivariano”
garantiza la continuidad de su corona parlamentaria.
Hoy su silencio, es solo comparable
con el mismo que guardaron con los compañeros cubanos silenciados, torturados y
asesinados por la tiranía de los hermanos Castros, el mismo régimen que hoy
hace de las suyas en la más vergonzosas de las colonias de la historia, la de
Venezuela ante Cuba.
Como anarquistas
no esperamos con los “compañeros” ibéricos den la lucha por nosotros/as, no
luchamos por que grupos opositores tomen el poder, luchamos por que estamos
arrechos, asqueados y solidarizados con ese pueblo llano que sufre las inclemencias
de un proceso excluyente y totalitario. Por ello, su silencio y poca
solidaridad es el reflejo de una oprobiosa complicidad con un gobierno
autoritario y capitalista.
Por ello…no
hablen de libertad… cuando ven a la de sus hermanos menguar.
pedro beltran wells era mi abuelo
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