Juan Linares
Por mas promesas y mentiras que difundan por los medios de comunicación públicos la realidad de SIDOR es otra, la convirtieron en una empresa improductiva y terminaron con los valores y principios de la clase trabajadora. Después de ser un aguerrido movimiento obrero, lo domesticaron y para eso usaron a la mayoría de la dirigencia sindical que se corrompió. Para lograr sus fines el gobierno nacional uso los poderes públicos como el CNE y el TSJ para suspender las elecciones sindicales, que para ese momento eran adversas al llamado proceso, mas ahora, con el pasar del tiempo la otrora empresa estrella de Guayana se hunde en la incapacidad, deficiencia y corrupción. Una empresa dirigida por militares, una vez más se demuestra el fracaso de los hombres de armas al frente de la administración de las instituciones, mas una empresa donde los conocimientos siderúrgicos y metalúrgicos es primordial.
Por mas promesas y mentiras que difundan por los medios de comunicación públicos la realidad de SIDOR es otra, la convirtieron en una empresa improductiva y terminaron con los valores y principios de la clase trabajadora. Después de ser un aguerrido movimiento obrero, lo domesticaron y para eso usaron a la mayoría de la dirigencia sindical que se corrompió. Para lograr sus fines el gobierno nacional uso los poderes públicos como el CNE y el TSJ para suspender las elecciones sindicales, que para ese momento eran adversas al llamado proceso, mas ahora, con el pasar del tiempo la otrora empresa estrella de Guayana se hunde en la incapacidad, deficiencia y corrupción. Una empresa dirigida por militares, una vez más se demuestra el fracaso de los hombres de armas al frente de la administración de las instituciones, mas una empresa donde los conocimientos siderúrgicos y metalúrgicos es primordial.
En trabajos realizados por la periodista de Correo del Caroní, María Ramírez Cabello, donde se plasma la verdadera situación de la empresa y se puede demostrar el desastre y debacle de SIDOR, en el 2016 y en 2017 el ritmo de producción sigue descendiendo, las cifras de la producción del primer trimestre no son muy alentadoras. Por ahora no hay excusas de mayor racionamiento eléctrico, los niveles de la hidroeléctrica de Guri están "normales", el problema persiste ante la falta de inversiones y recursos para la adquisición de insumos y equipos continúan. En estos primeros meses la Siderúrgica del Orinoco opero al 4 por ciento de su capacidad instalada, para muchos que no nos gusta esta realidad, SIDOR produjo en el primer trimestre lo que TERNIUM producía en solo cuatro días. Los trabajadores que aun mantiene la mística y el sentido de pertenencia que aún sienten a la empresa como suya y han laborados por años, los que han estado presente en el auge y caída. Se manifiestan con rabia y dolor "La mayor parte de la empresa está parada. Justo Noguera (presidente de la estatal) anda limpiando las calles de la ciudad y barriendo, mientras la empresa retrocede"
Los voceros de SIDOR prometieron una producción para el primer trimestre del año de 285.526 toneladas de acero líquido, la producción fue de solo 49.072 toneladas, el bajo desempeño en este lapso se atribuye a la baja provisión de insumos y la indisponibilidad de equipos. Acería de Palanquillas, paralizada desde septiembre de 2016, lo que detuvo desde hace siete meses la producción de rubros largos como alambrón y cabillas. Al no lograr reiniciarse este año la fabricación de productos largos, se ha dejado de producir 50 mil toneladas de alambrón y 17 mil toneladas de cabillas. Entretanto, la totalidad del acero sólido producido en el primer trimestre se obtuvo a través de la Acería de Planchones, que permite alimentar las líneas de producción de planos corriente abajo. Sin embargo, la fabricación de productos planos fue inferior al 10% de la capacidad instalada de la planta.
En Laminación en Caliente, la producción entre enero y marzo fue de 40.025 toneladas, apenas 24% de la programación y 6% de la capacidad instalada. La producción de este material necesario para la industria alimentaria fue mala y se ubico escasamente el 4% de la capacidad de la industria. A la par de la caída en producción de acero, la fabricación de alambrón y cabillas se contrajo. El retroceso en alambrón fue de 62%, mientras que la producción de cabillas se contrajo 75%. Solo se produjeron 29 mil 531 toneladas de barras, que equivalen a 7,5% de la capacidad instalada del área, equivalente a 390 mil toneladas al año. La producción de pellas alcanzó a 1,4 millones de toneladas, que representan apenas 18% de la capacidad instalada de producción del conglomerado por parte de la siderúrgica.
Un hito del 2016 fue la nula producción de hojalata para la fabricación de envases para alimentos. "Con una capacidad instalada para producir 280 mil toneladas anualmente, la producción del área es cero, siendo cubierta la demanda de este producto en el mercado nacional con bolsas aluminizadas u hojalata importada para el caso de la leche en polvo y tapas para cerveza u otros; así como envases de vidrio para el caso de sardina y atún". Transcurridos los primeros días del 2017, la meta del primer trimestre ya fue incumplida.
"Ya prácticamente no tenemos siderúrgica, sino una procesadora de materia prima, de producción de pellas. Operando un solo horno de la Acería de Palanquillas de manera continua, estaríamos por encima de esa producción de 2016. Esto no tiene nombre, sino responsables. Es una muestra de la malversación de fondos, es una cosa de locos". Así lo manifestó, el presidente del Colegio de Ingenieros de Venezuela, capítulo Ciudad Guayana y ex director principal de SIDOR, Pedro Acuña, la involución productiva, la dependencia del Estado y el retroceso del proceso de transformación de materia prima quedó más que demostrado en los terribles resultados de Sidor en el 2016. "En 1996, hace 20 años, cuando la empresa era 100% administrada por venezolanos con una nómina de 11.200 trabajadores y una capacidad de 3 millones 600 mil toneladas, fuimos capaces de producir 3 millones 100 mil toneladas de acero, hubo ganancias de 100 millones de dólares con importantes ingresos a la nación, se fabricó hojalata para abastecer todo el mercado de envases de productos alimenticios y por encima de las 300 mil toneladas de cabillas".
Esta es la verdad que no se atreven de ver los destructores de Guayana, ahora la siderúrgica, que fue en un tiempo la más importante de Latinoamérica, es un reflejo de lo que es la Venezuela actual, un desastre en medio de un gobierno manipulador y represivo.
El 2016 fue un año fatídico para SIDOR, la planta operó a solo 6% de su capacidad instalada, mientras tanto su presidente Justo Noguera Pietri y Juan Arias, ministro de Industrias Básicas, Estratégicas y Socialistas, celebraba la hecatombe de la fábrica con declaraciones a los medios de comunicación social.
En esa ocasión el ministro expreso: "Definitivamente, la recuperación de Sidor es uno de los principales logros del 2016. Gracias a sus trabajadores y del presidente Justo Noguera Pietri, quien está haciendo un extraordinario trabajo, hemos estabilizado a esta empresa". Para seguir con las loas y alabanzas de su nefasta gestión, el presidente de la empresa, dijo; "Se ha cumplido milimétricamente con el plan de recuperación ideado por los trabajadores de las plantas, los directores y gerentes. Hemos logrado superar las metas de producción. Le doy gracias a Dios y al presidente Nicolás Maduro por este reto bonito y de mucha patria que nos ha asignado. Estamos produciendo para el país".
Pero la realidad es otra, no se si en esas personas hay dignidad, cuando engañan descaradamente como mentirosos compulsivos. No se de donde sacan tanto optimismo ante el fracaso, ya que son los artífices del desastre productivo, técnico y administrativo de SIDOR, operó el 2016 a 6% de su capacidad instalada, su producción retrocedió 71% respecto al 2015.
En el 2016, la adversidad siguió ganando la batalla a la Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro (SIDOR) y su dirección militar, pues la acería produjo 307 mil 783 toneladas de acero líquido entre enero y diciembre: una caída de 71% respecto del año anterior y apenas 7% del máximo registro de producción alcanzado por la empresa en 2007.
En conocimiento de los graves problemas que presenta la empresa, continúan con el engaño y la manipulación de los venezolanos, cuando sigue con una incontinencia verbal, lo ilógico es que señalan y ellos se creen sus mentiras, porque los trabajadores siderúrgicos están cansados y conocen la realidad de su factoría. El presidente Justo Noguera en noviembre 2016 se comprometido que la producción de SIDOR en el 2017 seria de más de 3 millones 600 mil toneladas de acero líquido. Vaya sueño y para variar algo de ciencia-ficción.
En materia siderúrgica no ocurren los milagros; porque nadie puede ofrecer cumplir metas que son imposibles si no corrige las irregularidades en la empresa, como es la falta de insumos, equipos e inversiones, pero como este es una administración que se caracteriza por el engaño y la manipulación, prometen cifras y metas que no cumplirán y como todo es un desastre celebran cualquier tonelada producida. Es su mundo irreal y mágico. De todo lo prometido, 3 millones 600 mil toneladas de acero líquido, de los cuales se ha producido en el primer trimestre del año apenas 1.6%.
Para alcanzar la meta, SIDOR debería producir 327 mil 880 toneladas entre abril y diciembre, lo que significaría acercarse al ritmo operativo de hace una década, cuando había no solo disponibilidad de equipos sino también de insumos.
En enero, desde SIDOR, el presidente de la Republica en su retorica acostumbrada, acompañado por Justo Noguera y sus seguidores, en su mundo mágico se referían a SIDOR en unos términos irreales. "Se están produciendo actualmente 320 mil toneladas estables de planchones, está cubierto el mercado nacional y tenemos producción para ofertar al mercado internacional y traer divisas para el país", dijo Justo Noguera. Asimismo Maduro para acompañar al presidente de la empresa en sus fábulas. "Hoy reactivamos SIDOR con una capacidad productiva eficiente", valoraba en esa ocasión el mandatario nacional, a propósito de la reactivación de la producción de hojalata, actualmente paralizada.
El 2017 y sus resultados del primer trimestre, no podían ser muy halagadores, si realmente analizamos la situación interna en planta y no nos dejemos guiar por lo que dicen el presidente de la empresa, el ministro de Industrias Básicas, Estratégicas y Socialistas de turno, el presidente Maduro y los nigromante, todo es un teatro burlesco, donde se habla de maravillas y de milagros siderúrgicos. La Acería de Palanquillas está paralizada desde septiembre y sin fecha de arranque, la Acería de Planchones se detuvo el 6 de enero por falta de olivina -insumo mineral necesario para el funcionamiento de hornos-, anillos refrigerados y refractarios. Las dos Acerías están paralizadas
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