Oriana Faoro (Correo del Caroní)
En el Día del Maestro, los docentes de Venezuela celebran su día en medio de condiciones salariales desfavorables y pocos recursos en las escuelas públicas, lo que pone en picada la formación de nuevos profesionales de la educación. En la conmemoración del 15 de enero de cada año en Venezuela, se celebra que “enseñar es muy bonito, pero a veces uno no puede pensar solo en lo bonito, con una quincena de 18.000 o 20.000 bolívares, que no alcanza para nada”.
En el Día del Maestro, los docentes de Venezuela celebran su día en medio de condiciones salariales desfavorables y pocos recursos en las escuelas públicas, lo que pone en picada la formación de nuevos profesionales de la educación. En la conmemoración del 15 de enero de cada año en Venezuela, se celebra que “enseñar es muy bonito, pero a veces uno no puede pensar solo en lo bonito, con una quincena de 18.000 o 20.000 bolívares, que no alcanza para nada”.
“Si llueve me mojo porque hay filtraciones en el techo. Si hace calor sudo porque los aires y los ventiladores se los robaron todos. Es duro dar clases hoy en día… pero uno hace como el camaleón, se adapta”. Es el testimonio de una docente de la educación pública en Ciudad Guayana. Labora en un plantel de la vía a Río Claro, pero por temor a represalias y a perder su único empleo, exigió resguardar su identidad.
Ely, pseudónimo para la declarante, tiene ocho años dando clases. Considera que los sueldos de los docentes nunca han sido los mejores, “pero ahora, con la crisis, se siente más”. Por ejemplo, Ely debe tomar cuatro y cinco autobuses del transporte público para llegar y salir de la escuela, “porque los transportistas pican la ruta, dicen que no pueden hacer la ruta de antes con la inflación y un pasaje a 100 bolívares”. Unos mil bolívares diarios solo en pasaje, que cancela de su bolsillo.
El presidente del Sindicato Único del Magisterio (SUMA) Caroní-Piar, Rafael González, reveló que la prima por transporte obedece a 1.750 bolívares al mes, monto que queda rezagado incluso ante el precio establecido para el transporte público. Por otra parte, con escasos 100.000 bolívares al mes (incluyendo bono de alimentación), Ely debe pagar una canasta alimentaria que según el Centro de Documentación Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas – FVM), llegó a 460.381,55 bolívares en noviembre de 2016, último reporte publicado por ellos.
“Ningún salario va alcanzar la inflación (…) pero así un docente gane 2.000.000 de bolívares, aquí el Estado no garantiza una política de vivienda, de seguro, de adquisición de vehículos, como para que un docente dé clases tranquilo”, asegura González.
Menos profesores
González enfatizó que por las precarias condiciones de trabajo continuamente faltan los profesores. De hecho, se conoció que para el semestre de marzo de 2017, la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) Guayana, no abrirá ninguna de las tres menciones (Ciencias Sociales, Integral y Preescolar) por falta de alumnos inscritos. Según González, lo mismo ocurre en las públicas. Ely recuerda que los jóvenes no pueden entusiasmarse a entrar a enseñar en colegios donde puede que no haya baños suficientes para niñas y niños, o sin luz, o sin agua… Las mismas razones que también motivan la deserción del estudiantado.
El experto en currículo educativo y miembro de la organización Asamblea de Educación, Leonardo Carvajal, consideró en una nota de prensa que “los docentes son quizás el gremio profesional más golpeado por ese nefasto experimento social que es el socialismo del siglo XXI. Tan es así que el salario más alto que un docente puede recibir no alcanza ni para adquirir un 10% de la canasta básica familiar. Si hablamos del tema de la vivienda, un maestro venezolano tendría que ahorrar por más de 60 años la mitad de su sueldo, para poder pagar la cuota inicial de una vivienda de interés social”.
Celebraciones
No faltan los actos internos en las escuelas para congraciar a los profesionales de la educación. Tampoco actos solemnes del Estado. La Zona Educativa del estado Bolívar realizó este lunes una misa en la catedral de Ciudad Bolívar en honor a los maestros. El Consejo Legislativo del estado Bolívar (CLEB), en Heres, y el Concejo Municipal Socialista de Caroní (Comsocaroní), celebraron sesiones solemnes para reconocer a los docentes en su día.
El propio presidente Nicolás Maduro elevó una felicitación a los profesionales en su memoria y cuenta 2016 el 15 de enero, discurso donde prometió recursos para gestionar posgrados a través de la Micro Misión Simón Rodríguez, así como para el pago de las prestaciones sociales de los docentes jubilados.
Sin embargo, la celebración del Día del Maestro se ve seriamente empañada por el panorama económico y la necesidad de sostener familias y hogares. “Muchas veces me han dado ganas de tirar la toalla, pero todo lo que he construido con mis alumnos, los años labrados… Eso es lo que me hace seguir adelante”. Ely recuerda la importancia de enseñar con vocación, “lo bonito que los que fueron tus alumnos te vean y se recuerden qué aprendieron contigo, es lo más bonito que hay”. Pese a las dificultades, eso es “lo que me hace seguir”.
[Tomado de http://www.correodelcaroni.com/index.php/mas/educacion/item/52865-educacion-la-profesion-subpagada-y-amenazada-por-falta-de-nuevos-ingresos.]
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