José del Carmen Pérez
[Nota previa de El Libertario: Aún cuando para nada compartimos el ingenuo optimismo del autor de este post, pidiendo a "Mr Músculo" el "Doctor" Tarek Williams que resuelva este descarado caso de corrupción policial, nos parecio que bien valía la pena reproducirlo en cuanto es una ejemplo entre muchos de la podredumbre que campea en los cuerpos represivos del Estado venezolano.]
Una bochornosa realidad viven los habitantes de Pariaguán, municipio Miranda del estado Anzoátegui, por la conducta perversa, corrupta y amoral de algunos policiales estadales y municipales que cometen delitos directos y comprobados (además comprobables) contra los conductores locales.
[Nota previa de El Libertario: Aún cuando para nada compartimos el ingenuo optimismo del autor de este post, pidiendo a "Mr Músculo" el "Doctor" Tarek Williams que resuelva este descarado caso de corrupción policial, nos parecio que bien valía la pena reproducirlo en cuanto es una ejemplo entre muchos de la podredumbre que campea en los cuerpos represivos del Estado venezolano.]
Una bochornosa realidad viven los habitantes de Pariaguán, municipio Miranda del estado Anzoátegui, por la conducta perversa, corrupta y amoral de algunos policiales estadales y municipales que cometen delitos directos y comprobados (además comprobables) contra los conductores locales.
Tengo en mi poder tres testimonios directos y fidedignos. A una joven mujer le robaron su moto hace tres meses y cuando puso la denuncia ante la policía, el funcionario le pidió Bs. 15.000 y se la devolvían. Hecho el pago, el policía le dijo dónde estaba. La moto apareció intacta.
A otra pareja de trabajadores dedicados a la venta de comida justo al lado de la antigua sede de la policía metropolitana le robaron la pickup Ford del año 2007 tres sujetos armados. A la hora los llamaron para decirles que no fueran a la policía a perder su tiempo y que dispusieran de Bs. 3.000.000,oo. La camioneta apareció intacta. Se supo que algunos de los atracadores eran policías pero tienen bajo amenaza de muerte a la pareja de trabajadores, quienes son personas muy conocidas y apreciadas en Pariación, si abren la boca o interponen alguna denuncia.
El pasado lunes 20 de junio pusieron una alcabala improvisada dentro del mismo pueblo, a las 5 pm y detuvieron a un joven estudiante universitario que regresaba de practicar deportes en el carro de su padre. Le exigieron la documentación respectiva, la cual está toda en regla. Sin embargo, un policía lo distrajo al muchacho mientras el otro "requisaba" el vehículo. Por arte de magia el policía corrupto sacó un paquete de drogas de dentro de uno de los zapatos de jugar pelotas.
Al estudiante lo llevaron al comando de la policía estadal de inmediato (carne de cañón), y con absoluto desparpajo le pidieron Bs. 25.000 para no pasarlo a Fiscalía. Consumado el delito policial le explicaron a sus padres que ellos, los policías que cometieron el chantaje y la vacuna, son de Ciudad Bolívar. Unos delincuentes. Que dejaran eso así, y que no les "echaran paja".
Estimado Defensor del Pueblo, Dr. Tarek William Saab, por favor mande usted a intervenir de inmediato estas policías de Pariaguán. Que no destituyan a ningún funcionario, sino que le den garantías a las víctimas de sus fechorías para que acudan, sin miedo, como testigos acusadores a exponer sus tragedias particulares, por cuanto son los afectados directos. Luego enjuicien a estos policías delincuentes y métanles tantos años de cárcel como les corresponda.
Este país no saldrá jamás del atraso y de sus derrotas morales mientras seamos indiferentes ante este tipo de atropellos. Por favor, ministro de Interior y Justicia y demás organismos centrales, URGE INTERVENIR LA PÒLICIA ESTADAL Y MUNICIPAL DE PARAGUÁN. Basta de tanta corrupción, tanta impunidad y tanta indiferencia. Por otro lado, existe complicidad entre algunos funcionarios policiales y los choros, vendedores de drogas, cuatreros y pillos en general de esta zona sur del estado Anzoátegui. Por ello, urgen medidas radicales e inmediatas al respecto. El pueblo exige justicia. La justicia exige ejemplaridad. Los ciudadanos estamos cansados de tantas miserias y para colmo de males, también nos atracan y mancillan los funcionarios del llamado "orden público". ¿Y cual será, entonces, el desorden?
[Tomado de http://www.aporrea.org/contraloria/a230090.html.]
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