Günter Marie Willkommen
Si metiésemos en una licuadora a un científico , un espiritista, un hipnotizador , un poeta, un libertario, un poco de jengibre, aceto balsámico, jugo de limón , tres gotas de alcohol boricado, una pizca de páprika , una medidita de bicarbonato de sodio, azul de prúsia ,una cucharadita de cacao venezolano al 100% y tres huevos, batiéramos un tiempo y esparciéramos la mescolanza sobre una bandejota, al cabo de 23 minutos observaríamos como , quien se corporiza no es otro que el bueno de Camille Flammarion. tenga a bien acercarle una bata o toallón, pues estará completamente desnudo.
A la temprana edad de 16 años, Flammarión ingresó como colaborador en el Observatorio de París. Para aceptarlo lo obligaron rendir un exigente exámen de matemáticas cuyo resultado impactó en el director de la institución de tal forma que le dijo “ a partir del lunes, trabajarás aquí”. Cuatro años mas tarde, putrefacto de envidia, el mismo sujeto lo expulsó , luego de que nuestro amigo publicara su primer libro “La pluralidad de los mundos habitados”. El castrador funcionario adujo que “un astrónomo observa, no escribe”. Sin tiempo para perder lamentándose, Camille fundó su propio observatorio en Juvisy-sur-Orge. En sus publicaciones se explayaba sobre filosofía, ciencia y poesía con contundente autoridad. también incursionó en el espiritismo, sobre el que decía que no era una religión, sino una ciencia a la que en algunos casos se le complicaba dar explicaciones sobre ciertos fenómenos, pero el tiempo daría a la humanidad esas respuestas. Rechazó la presidencia de la Sociedad Espiritista de París porque decía que la mayoría de sus socios interpretaban la disciplina como una religión.
Si metiésemos en una licuadora a un científico , un espiritista, un hipnotizador , un poeta, un libertario, un poco de jengibre, aceto balsámico, jugo de limón , tres gotas de alcohol boricado, una pizca de páprika , una medidita de bicarbonato de sodio, azul de prúsia ,una cucharadita de cacao venezolano al 100% y tres huevos, batiéramos un tiempo y esparciéramos la mescolanza sobre una bandejota, al cabo de 23 minutos observaríamos como , quien se corporiza no es otro que el bueno de Camille Flammarion. tenga a bien acercarle una bata o toallón, pues estará completamente desnudo.
A la temprana edad de 16 años, Flammarión ingresó como colaborador en el Observatorio de París. Para aceptarlo lo obligaron rendir un exigente exámen de matemáticas cuyo resultado impactó en el director de la institución de tal forma que le dijo “ a partir del lunes, trabajarás aquí”. Cuatro años mas tarde, putrefacto de envidia, el mismo sujeto lo expulsó , luego de que nuestro amigo publicara su primer libro “La pluralidad de los mundos habitados”. El castrador funcionario adujo que “un astrónomo observa, no escribe”. Sin tiempo para perder lamentándose, Camille fundó su propio observatorio en Juvisy-sur-Orge. En sus publicaciones se explayaba sobre filosofía, ciencia y poesía con contundente autoridad. también incursionó en el espiritismo, sobre el que decía que no era una religión, sino una ciencia a la que en algunos casos se le complicaba dar explicaciones sobre ciertos fenómenos, pero el tiempo daría a la humanidad esas respuestas. Rechazó la presidencia de la Sociedad Espiritista de París porque decía que la mayoría de sus socios interpretaban la disciplina como una religión.
Camille no creía en la muerte. decía que se podía trascender, pero para entender esto se debía modificar la perspectiva humana, dejar de ver el cosmos con los ojos de los poderosos del mundo. Fundamentaba que la concepción dual cielo vs tierra, estaba vinculada a las ideas de cielo e infierno, vida y muerte, con las que los poderes de turno (iglesias, estados y empresas) dominaban a las masas proletarias. Él decía:” la tierra no está debajo del cielo; el cielo no es extraño a la tierra; la tierra no flota a través del cielo;y nosotros vivimos actualmente en el cielo”. Gran observador de Marte, fue homenajeado al nombrarse a un crater del planeta rojo como Flammarion. Fundó la Sociedad Astronómica Francesa. Durante un sueño, Camille fue visitado por Urania, musa de la astronomía (y deidad libertaria si las hay). Urania le habló, le encomendó una misión: “llevar la antorcha de la astronomía a las masas! En especial a las marginadas por su clase. Colectivizar esa flama liberándola del hermético círculo de los autoproclamados astrónomos profesionales! ¡viva la anarquía, propulsora del kosmos!”
Flammarion era un romántico (como todo libertario que se precie). A los dieciseis, cuando ingresó al Observatorio de París, se enamoró de Sylvie Petiaux, ocho años mayor que el, astrónoma feminista, creadora de la Asociación “para la paz y el desarme por las mujeres”. Ella estaba casada con otro prestigioso astrónomo (a quien Camille también amaba). Luego de la muerte del viejo, Sylvie y Camille se casaron. Ninguno creía en la institución matrimonial, pero celebraron la unión para que los invitados les solventen una luna de miel en globo aerostático, periplo que comenzó la misma noche del casamiento y los convirtió en el primer matrimonio aerostático de la historia. Juntos compartieron la investigación del kosmos. Tiempo mas tarde entra en escena la brillante Gabrielle Renaudot, también astrónoma, treinta y cinco años mas joven que Camille y 43 menor que Sylvie, para enamorarse de ambos y continuar como la nueva esposa de Camille luego de la partida de sylvie.
El nuevo casamiento consistió en un ritual celebrado en un lodazal donde todos los presentes se revolcaron en una de las mas memorables apologías contra el matrimonio. Sylvie, Flammarion y Gabrielle, solían dar paseos en una bicicleta triple (Camille iba en el medio, Gabrielle detrás y conducía Sylvie; se ordenaban de mayor a menor, de adelante hacia atrás). Se conoce que en 1915, luego de un descubrimiento -sobre el que los historiadores no se ponen de acuerdo-, nuestros tres amigos, desbordados de euforia, se desnudaron, montaron en su tandem y salieron a pedalear en la nocturnidad que rodeaba al observatorio en lo que se registra como el primer caso de ciclonudismo en bicicleta múltiple. mientras rodaban, se comenta, gorgeaban a tres voces, canciones de taberna.
[Tomado de http://refractarix.blogspot.com/2015/09/ejemplos-de-vida-hoy-camille-flammarion.html.]
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