Alejandro González
Es ya bien sabida la existencia de grupos de autodefensa originados en distintas localidades de estados como Guerrero, Michoacán y Oaxaca (por mencionar a los más sobresalientes). Si bien el origen de muchos de estos grupos es confuso, aún declarando que son resultado de la inseguridad por el narcotráfico, algunos otros no son más que reflejos de la ineficacia no de un gobierno estatal, municipal o nacional, sino del ente que les da forma y vida, el Estado.
Este fenómeno, como veremos, no es exclusivo de esos estados olvidados aparentemente por el órgano de seguridad estatal, sino más bien es una clara expresión de la necesidad del pueblo de organizarse de acuerdo a sus necesidades y deseos, producto de su propia experiencia y voluntad, al menos en el Estado de México, que es la prueba más visible que ilustra de una forma muy clara la siguiente tesis: la existencia del Estado resulta inútil y nociva para la ejecución de las libres voluntades del pueblo.
La existencia de lo que podríamos llamar grupos de autodefensa surgidos en asambleas comunales y formados por los mismos colonos en localidades como Ecatepec, Ozumba, Coacalco, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Chalco, Tejupilco, Melchor Ocampo, Otzolotepec, Luvianos, Amatepec y Tlatlaya(1), pone al desnudo la necesidad de organizarse frente a la inseguridad que asecha severamente al Estado de México y al país en general, siendo más visible esto en las zonas marginadas.
En el caso de las comunidades rurales antes mencionadas, los pobladores han tenido que tomar acciones como supervisión y vigilancia de las entradas y salidas del pueblo así como rondines nocturnos con el fin de acabar con los constantes robos, asaltos, extorsiones y secuestros. Cosa similar han hecho los habitantes de Neza y Ecatepec al montar guardias nocturnas en sus respectivas colonias con el fin de disminuir la inseguridad.
En primera instancia las "autoridades" minimizaron el fenómeno y dieron su propio análisis. Al respecto, el alcalde de Tlalnepantla, Pablo Basáñez, señaló que "No es un grupo de autodefensa, ellos se denominan así, sin embargo yo creo que no hay una autodefensa cuando existe un Estado de derecho y que nadie puede tomar las armas, porque cuando alguien lo hace así, de entrada, comete un delito”(2). Así mismo, el senador Alejandro Encinas en su informe de actividades legislativas, a principios de este año, declaró el conocimiento de estos grupos y, por su parte, Efraín Rojas, ex secretario general de gobierno del Estado de México, "descartó que la existencia de dichos grupos sea una muestra de ingobernabilidad; más bien, dijo: "significa que la sociedad tiene exigencias claras y que el gobierno debe visualizarlas y entenderlas, sobre todo para atenderlas"."(3)
Estos brotes de organización popular muestran la capacidad que tiene la población para poner en marcha las acciones que consideran necesarias para sus respectivas comunidades. Con esto podemos concluir la existencia de la posibilidad de que el pueblo empiece a emplear libremente su voluntad para construir y destruir todo aquello que considere necesario.
Notas:
(1) http://www.milenio.com/política/autodefensa-municipio-Edomex_0_236376933.html
(2) http://www.reforma.com/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?id=275344&urlredirect=
(3) http://www.proceso.com.mx/?p=376064
[Publicado originalmente en el periódico Apoyo Mutuo # 12, Nov. 2014-Enero 2015, México. Edición completa accesible en http://www.federacionanarquistademexico.org/periodico-apoyo-mutuo/nuevo-numero.]
Es ya bien sabida la existencia de grupos de autodefensa originados en distintas localidades de estados como Guerrero, Michoacán y Oaxaca (por mencionar a los más sobresalientes). Si bien el origen de muchos de estos grupos es confuso, aún declarando que son resultado de la inseguridad por el narcotráfico, algunos otros no son más que reflejos de la ineficacia no de un gobierno estatal, municipal o nacional, sino del ente que les da forma y vida, el Estado.
Este fenómeno, como veremos, no es exclusivo de esos estados olvidados aparentemente por el órgano de seguridad estatal, sino más bien es una clara expresión de la necesidad del pueblo de organizarse de acuerdo a sus necesidades y deseos, producto de su propia experiencia y voluntad, al menos en el Estado de México, que es la prueba más visible que ilustra de una forma muy clara la siguiente tesis: la existencia del Estado resulta inútil y nociva para la ejecución de las libres voluntades del pueblo.
La existencia de lo que podríamos llamar grupos de autodefensa surgidos en asambleas comunales y formados por los mismos colonos en localidades como Ecatepec, Ozumba, Coacalco, Nezahualcóyotl, Tlalnepantla, Chalco, Tejupilco, Melchor Ocampo, Otzolotepec, Luvianos, Amatepec y Tlatlaya(1), pone al desnudo la necesidad de organizarse frente a la inseguridad que asecha severamente al Estado de México y al país en general, siendo más visible esto en las zonas marginadas.
En el caso de las comunidades rurales antes mencionadas, los pobladores han tenido que tomar acciones como supervisión y vigilancia de las entradas y salidas del pueblo así como rondines nocturnos con el fin de acabar con los constantes robos, asaltos, extorsiones y secuestros. Cosa similar han hecho los habitantes de Neza y Ecatepec al montar guardias nocturnas en sus respectivas colonias con el fin de disminuir la inseguridad.
En primera instancia las "autoridades" minimizaron el fenómeno y dieron su propio análisis. Al respecto, el alcalde de Tlalnepantla, Pablo Basáñez, señaló que "No es un grupo de autodefensa, ellos se denominan así, sin embargo yo creo que no hay una autodefensa cuando existe un Estado de derecho y que nadie puede tomar las armas, porque cuando alguien lo hace así, de entrada, comete un delito”(2). Así mismo, el senador Alejandro Encinas en su informe de actividades legislativas, a principios de este año, declaró el conocimiento de estos grupos y, por su parte, Efraín Rojas, ex secretario general de gobierno del Estado de México, "descartó que la existencia de dichos grupos sea una muestra de ingobernabilidad; más bien, dijo: "significa que la sociedad tiene exigencias claras y que el gobierno debe visualizarlas y entenderlas, sobre todo para atenderlas"."(3)
Estos brotes de organización popular muestran la capacidad que tiene la población para poner en marcha las acciones que consideran necesarias para sus respectivas comunidades. Con esto podemos concluir la existencia de la posibilidad de que el pueblo empiece a emplear libremente su voluntad para construir y destruir todo aquello que considere necesario.
Notas:
(1) http://www.milenio.com/política/autodefensa-municipio-Edomex_0_236376933.html
(2) http://www.reforma.com/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?id=275344&urlredirect=
(3) http://www.proceso.com.mx/?p=376064
[Publicado originalmente en el periódico Apoyo Mutuo # 12, Nov. 2014-Enero 2015, México. Edición completa accesible en http://www.federacionanarquistademexico.org/periodico-apoyo-mutuo/nuevo-numero.]
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