William Peña
Desde noviembre pasado la guillotina del regulador Conatel no ha parado y en 12 meses un poco más de 1.019 páginas web han sido bloqueadas para ser ingresadas desde Venezuela.
Y es que la decisión de limitar el acceso de los venezolanos a una serie de páginas vistas por el Gobierno como medios para propagar información falsa y amedrentar a la población ha afectado la libertad de información y expresión en en los medios digitales, los únicos que, hasta el año pasado, por lo menos oficialmente, no recibían bloqueos desde el Ejecutivo. Pero la providencia administrativa de Conatel, divulgada en noviembre de 2013, abrió la puerta para que el organismo tomara la decisión de bloquear cualquier página web que, a su juicio, atentara contra la nación, los ciudadanos y, por supuesto, contra el Gobierno al denunciar informaciones o transmitir noticias que no fuesen del agrado del Ejecutivo.
Además, las salas situacionales se encargaron de pasar al regulador una lista de páginas donde se hacen comentarios y se desarrollan informaciones sobre corrupción que no deberían ser leídas en la nación o se publican noticias sobre el valor del dólar negro, además de las denuncias sobre casos de estafas, sobornos, entre otros y Conatel diariamente las envía a empresa webmaster para que procedan al bloqueo.
Según las estadísticas, Conatel bloquea un promedio de 2,7 páginas web por día, además de la otras web que han sido bloqueadas por decisión de la estatal Cantv y que no aparece en la lista que el regulador entrega a las webmaster.
Y ese bloqueo se vienen incrementando con fuerza a medida que los medios de comunicación tradicionales pasan a manos de propietarios que, con fondos de dudosa procedencia que no son investigados por el Gobierno Nacional, implementan nuevas reglas para ejercer el periodismo (censura y complacencia) e impulsan a decenas a informar a través de la creación de medios digitales que terminan siendo censurados en la Venezuela "socialista" del siglo 21.
El último listado contabiliza 1.019 páginas web bloqueadas hasta el pasado 15 de octubre, más del doble que el último número de principios de años y, aunque la mayoría de ellas pertenecen a la guerra que desde el Gobierno han librado con las páginas web que anuncian el valor del dólar negro, entre los objetivos también figuran una gran cantidad de sitios que informan u opinan sobre el tema político venezolano y páginas donde se tocan los temas relacionados con la corrupción, entre otros. El número impacta considerablemente, sobre todo en un país que se ufana de ser uno de los más democráticos del mundo, pero donde la opinión crítica y la información tradicional y digital están bajo amenaza constante.
La censura y bloqueo se ha expandido a sitios con información política, económica, de análisis, pero también páginas web que difunden información sobre casos específicos de corrupción y, entre ellas, destacan los sitios de Alek Boyd, un investigador y articulista internacional que ha tocado temas sensibles que involucran a altos funcionarios del Gobierno en casos de corrupción, así como a empresas venezolanas.
Esa misma historia la cuentan hoy día sitios como la argentina Infobae, bloqueada hace un par de semanas atrás y otros como la colombiana de televisión NTN24, que no puede ser vista en el país desde febrero pasado, a menos que quien la quiera sintonizar en la red conozca de los sistemas que existen para superar los bloqueos de sitios en Internet.
La presión a los medios y la censura oficial no sólo invadieron a los medios digitales, sino que poco a poco han convertido trincheras como Twitter en ventanas que les permiten amedrentar y perseguir a los venezolanos que disienten y opinan en esos entornos. En Venezuela hay cerca de 10 twitteros presos por emitir opinión en la red, pero la mayoría de ellos son desconocidos en los entornos, sin influencia más allá de unos pocos amigos, pero son carnadas para que el miedo aterrice en los millones que usan las redes para opinar, analizar y criticar los problemas que padece la nación y a los que no le ven solución bajo el dominio del actual Gobierno.
El bloqueo de las páginas web es sólo una de las diversas formas de presión y censura que el Gobierno Nacional viene aplicando en el país. La presión a los anunciantes para que no inviertan en medios de comunicación no oficiales, tanto tradicionales como digitales, así como las constantes llamadas a los jefes en las redacciones para cambiar titulares o cortar la cabeza de quienes escriben se han hecho historias cotidianas entre los periodistas en Venezuela. Además de los bloqueos oficiales, fuentes consultadas comentaron que la estatal Cantv tiene una lista de sitios web que también tiene bloqueados y a los que, dependiendo como sea la presión, decide abrirlos o mantenerlos cerrados para sus clientes de Internet, que pueden alcanzar el 88% del total de cuentas suscritas que hay en el país.
[Tomado de http://www.conflictove.org.ve/analisis-y-opinion/conatel-guillotino-1-019-paginas-web-articulo-de-william-pena.html.]
Desde noviembre pasado la guillotina del regulador Conatel no ha parado y en 12 meses un poco más de 1.019 páginas web han sido bloqueadas para ser ingresadas desde Venezuela.
Y es que la decisión de limitar el acceso de los venezolanos a una serie de páginas vistas por el Gobierno como medios para propagar información falsa y amedrentar a la población ha afectado la libertad de información y expresión en en los medios digitales, los únicos que, hasta el año pasado, por lo menos oficialmente, no recibían bloqueos desde el Ejecutivo. Pero la providencia administrativa de Conatel, divulgada en noviembre de 2013, abrió la puerta para que el organismo tomara la decisión de bloquear cualquier página web que, a su juicio, atentara contra la nación, los ciudadanos y, por supuesto, contra el Gobierno al denunciar informaciones o transmitir noticias que no fuesen del agrado del Ejecutivo.
Además, las salas situacionales se encargaron de pasar al regulador una lista de páginas donde se hacen comentarios y se desarrollan informaciones sobre corrupción que no deberían ser leídas en la nación o se publican noticias sobre el valor del dólar negro, además de las denuncias sobre casos de estafas, sobornos, entre otros y Conatel diariamente las envía a empresa webmaster para que procedan al bloqueo.
Según las estadísticas, Conatel bloquea un promedio de 2,7 páginas web por día, además de la otras web que han sido bloqueadas por decisión de la estatal Cantv y que no aparece en la lista que el regulador entrega a las webmaster.
Y ese bloqueo se vienen incrementando con fuerza a medida que los medios de comunicación tradicionales pasan a manos de propietarios que, con fondos de dudosa procedencia que no son investigados por el Gobierno Nacional, implementan nuevas reglas para ejercer el periodismo (censura y complacencia) e impulsan a decenas a informar a través de la creación de medios digitales que terminan siendo censurados en la Venezuela "socialista" del siglo 21.
El último listado contabiliza 1.019 páginas web bloqueadas hasta el pasado 15 de octubre, más del doble que el último número de principios de años y, aunque la mayoría de ellas pertenecen a la guerra que desde el Gobierno han librado con las páginas web que anuncian el valor del dólar negro, entre los objetivos también figuran una gran cantidad de sitios que informan u opinan sobre el tema político venezolano y páginas donde se tocan los temas relacionados con la corrupción, entre otros. El número impacta considerablemente, sobre todo en un país que se ufana de ser uno de los más democráticos del mundo, pero donde la opinión crítica y la información tradicional y digital están bajo amenaza constante.
La censura y bloqueo se ha expandido a sitios con información política, económica, de análisis, pero también páginas web que difunden información sobre casos específicos de corrupción y, entre ellas, destacan los sitios de Alek Boyd, un investigador y articulista internacional que ha tocado temas sensibles que involucran a altos funcionarios del Gobierno en casos de corrupción, así como a empresas venezolanas.
Esa misma historia la cuentan hoy día sitios como la argentina Infobae, bloqueada hace un par de semanas atrás y otros como la colombiana de televisión NTN24, que no puede ser vista en el país desde febrero pasado, a menos que quien la quiera sintonizar en la red conozca de los sistemas que existen para superar los bloqueos de sitios en Internet.
La presión a los medios y la censura oficial no sólo invadieron a los medios digitales, sino que poco a poco han convertido trincheras como Twitter en ventanas que les permiten amedrentar y perseguir a los venezolanos que disienten y opinan en esos entornos. En Venezuela hay cerca de 10 twitteros presos por emitir opinión en la red, pero la mayoría de ellos son desconocidos en los entornos, sin influencia más allá de unos pocos amigos, pero son carnadas para que el miedo aterrice en los millones que usan las redes para opinar, analizar y criticar los problemas que padece la nación y a los que no le ven solución bajo el dominio del actual Gobierno.
El bloqueo de las páginas web es sólo una de las diversas formas de presión y censura que el Gobierno Nacional viene aplicando en el país. La presión a los anunciantes para que no inviertan en medios de comunicación no oficiales, tanto tradicionales como digitales, así como las constantes llamadas a los jefes en las redacciones para cambiar titulares o cortar la cabeza de quienes escriben se han hecho historias cotidianas entre los periodistas en Venezuela. Además de los bloqueos oficiales, fuentes consultadas comentaron que la estatal Cantv tiene una lista de sitios web que también tiene bloqueados y a los que, dependiendo como sea la presión, decide abrirlos o mantenerlos cerrados para sus clientes de Internet, que pueden alcanzar el 88% del total de cuentas suscritas que hay en el país.
[Tomado de http://www.conflictove.org.ve/analisis-y-opinion/conatel-guillotino-1-019-paginas-web-articulo-de-william-pena.html.]
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