Con la tecnología de Blogger.

jueves, 3 de abril de 2014

Opinión desde Argentina - El mito de la izquierda se cae de Maduro


La Oveja Negra - Rosario
 
La situación social y económica de Venezuela, tras 14 años de gobierno chavista y poco más de un año de gobierno madurista, no podía arrojar más que los resultados que estamos viendo hoy. Es necesario entonces hacer un repaso histórico para contextualizar el presente estallido social.

Esta sucesión de gobiernos “socialistas” y su crisis actual sólo puede entenderse y denunciarse a sabiendas de que el socialismo del que se habla es, sin lugar a dudas, un “socialismo” burgués. Es la socialdemocracia instaurando sus gobiernos “obreros”, reivindicando la soberanía nacional, la defensa de la economía nacional, pretendiendo gobernar para la clase a la que aplasta. Así, con estatizaciones, una gran renta proveniente del petroleo, una enorme burocracia, mucho nacionalismo y populismo, y palos y migajas para la mayoría del proletariado,  se gesta la revolución bolivariana, constituyéndose Venezuela en el bastión del tan de moda Socialismo del Siglo XXI (sobre el que ya hemos tenido oportunidad de hablar en el nro. 7 de La Oveja Negra).
 
Ahora bien, el hecho de que los medios de producción sean estatales o no, no cambia nada. A los proletarios no nos hace ninguna diferencia que quien nos explote sea un dueño particular, el gobierno nacional o una multinacional. El Capital no posee un único método para reproducirse, utiliza aquél que le sirve a los fines de una mejor reproducción, a su propia valorización. En este sentido, si utiliza el intervencionismo estatal y la lógica pseudo “socialista” sólo lo hace en las ocasiones en que le resulta beneficioso, en tanto concilia los intereses antagónicos de las clases y le permite continuar desarrollándose, ampliándose y utilizando a la población con la excusa del crecimiento de la economía nacional. Como una gran falacia, el “socialismo” burgués pretende que exista el socialismo en un sólo país, lo cual en tanto interés nacionalista (regional, parcial) no puede ser más que interés de la burguesía que apunta a la atomización del proletariado. Sea bajo la forma que sea, todo Estado es imperialista. Toda disputa o alianza entre Estados no es más que la consecuencia del desarrollo de las economías nacionales, es decir, de intereses burgueses particulares y nunca intereses del proletariado.
 
Las crisis de Venezuela siempre fueron asociadas, tanto por Chávez como por Maduro, a intentos de golpes de Estado o complots yankees, y codificadas como la lucha contra la derecha o el “imperialismo”. En coherencia absoluta, el discurso de Nicolás Maduro reitera que enfrenta un “Golpe de Estado”, que sería similar a lo sucedido en abril del 2002 con Hugo Chávez. La falsa dicotomía país socialista-potencia imperialista que denunciábamos más arriba se desnuda a su vez en los acuerdos comerciales entre dichos países. La búsqueda de ganancia, así como en otros contextos la necesidad de reprimir al proletariado en momentos de gran convulsión social, obliga a buscar algún nuevo vericueto discursivo para justificar alianzas y medidas. Así lo demuestran las medidas adoptadas por el chavismo frente a la producción de petróleo en su territorio.
 
Después del paro petrolero en 2002, el gobierno encabezado por Chávez se propuso recuperar las empresas petroleras del país. A partir del año 2005 se emprenden una serie de acciones para recuperar la Faja Petrolífera del Orinoco, considerada como el mayor depósito de hidrocarburos del planeta. Ya en 2007 se decreta la Ley 5.200, que instituye la nacionalización de la Faja. Se conforman numerosas empresas mixtas petroleras, en las que el Estado venezolano obtiene la mayoría accionaria mediante su empresa estatal de petróleo y gas natural Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA), recobrando de este modo el control -y gran parte de las regalías- de las empresas que estaban en manos de capitales internacionales.
 
A pesar de la exagerada y descabellada propaganda mediática contra el imperialismo estadounidense, un gran aliado en la conformación de estas empresas mixtas fue la multinacional Chevron, conocida por el desastre medioambiental que generó en Ecuador. Los defensores del “Socialismo del siglo XXI” como todos los defensores del capitalismo siempre tienen una justificación para estos negociados, cuando no es “estratégico” es simplemente “necesario”. En Venezuela el petroleo constituye la primordial fuente de ingresos. Los destinos de sus barriles de crudo son principalmente Estados Unidos y en menor medida Europa y algunos países latinoamericanos.
 
Los acuerdos económicos de las petroleras son disfrazados con discursos que apuntan a la «soberanía petrolífera» y a la promoción de las Misiones Sociales. Éstas surgen como iniciativa del gobierno nacional bolivariano y constituyen un conjunto de medidas para atender a los sectores populares del país. Su aparición ocurre dentro de un clima de conflicto social y económico, cuyos momentos más álgidos fueron el intento de Golpe de Estado en abril de 2002, el Paro petrolero de diciembre del mismo año y el Referendo Revocatorio de agosto de 2004. Al día de hoy, las empresas mixtas son reconocidas y vanagloriadas por «fortalecer la seguridad social del país» cuando crece el presupuesto asignado a las Misiones.
 
Si Venezuela consiguió durante mucho tiempo limitar el deterioro es porque su fuerza de choque petrolera le confiere una ventaja comercial y monetaria importante. Pero ésta no basta para garantizar la estabilidad de la moneda y la fuga de capitales, sumado a que la redistribución de la renta petrolera presentaba un riesgo inflacionario, hoy confirmado. Durante las últimas cuatro semanas el gobierno de Maduro anunció, prácticamente día tras día, nuevas medidas que prometen remediar la inflación y el desabastecimiento. Pero más allá de las apasionadas discusiones entre el gobierno y la oposición, el descontento se vivió en la calle.

Cuando la zanahoria se pudrió...
 
Ahora que todo estalló, que la inflación en Venezuela es la más alta de América Latina, que este gran cúmulo de hombres y mujeres arrojados a la miseria y sometidos al desabastecimiento y al hambre han salido a la calle, ya no puede dibujarse la situación con paliativos basados en medidas populares. Recientemente Maduro optó por decisiones similares con el objetivo de hacerle frente a lo que él denomina «guerra económica» o «sabotaje económico de facciones apátridas». Estas medidas, que van desde la Ley Habilitante de costos y precios justos, pasando por un nuevo sistema de subsidios para adquirir productos de primera necesidad, hasta la implementación de un nuevo sistema cambiario y la re-estructuración de la administración de las divisas en el país, apuntan al intervencionismo y a la estatización para reforzar la economía nacional. Tampoco servirán las disparatadas propagandas oficiales, movilizaciones pro-Maduro o las navidades y carnavales adelantados. Es momento entonces de mirar más de cerca qué es lo que sucede con el golpeado proletariado que habita la región venezolana.
 
El 4 de febrero se desataron protestas estudiantiles que tuvieron su génesis en la agresión sexual a una estudiante en la Universidad Nacional Experimental del Táchira. Algunos días después, el 12 de febrero, una manifestación estudiantil en Caracas desató una serie de revueltas en el país. Lo que comenzó como un reclamo estudiantil frente a la situación de inseguridad terminó con represión estatal y un saldo de 14 estudiantes detenidos. Las consiguientes protestas por la liberación de esos estudiantes fueron las que desataron la tensión que venía acumulándose en el contexto de la crisis económica, la situación de escasez de bienes de primera necesidad y de servicios básicos, así como el comienzo de la aplicación de un paquete de medidas económicas por parte del gobierno. Las manifestaciones se propagaron por otras ciudades, especialmente en Mérida, Táchira y Trujillo y fueron igualmente reprimidas por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), además de los famosos grupos paramilitares financiados indirectamente e impulsados directamente por este Estado.
 
En este contexto, parte de la oposición, como los partidos encabezados por María Corina Machado y Leopoldo López, quisieron sacar provecho de la situación y llamaron a movilizar exigiendo, entre otras cosas, la renuncia de Maduro, en un intento de canalizar las protestas, legalizarlas, politizarlas. A su vez, los demás partidos opositores que forman la Mesa de la Unidad Democrática, especie de amalgama socialdemócrata, progresista cristiana, reformista, liberal (y podríamos seguir…) que constituye la principal oposición de Venezuela, se opusieron abiertamente a las protestas y realizaron un llamamiento a abandonar las movilizaciones durante tres días. Éste fue desoído por la gente que continuó en la calle, superando así la parcialidad de unos y la pasividad de otros, generalizando la protesta por gran parte de Venezuela.
 
Las movilizaciones se extendieron a muchos puntos del país y fueron convocadas en su mayoría mediante “redes sociales”. A su vez, en cada zona las opiniones y razones que impulsaron las movilizaciones varían. En el caso de Caracas fueron protagonizadas especialmente por sectores de clase media y universitarios, y los pedidos versaron sobre cuestiones políticas, como la renuncia de Maduro y la modificación del modelo social y económico. Al interior del país se sumaron sectores populares a la protesta, incorporando demandas sociales tales como la crítica a la inflación, la escasez y la falta de servicios básicos.
 
Luego de algunos días de relativa calma, el sábado 22 de marzo se reanudaron las manifestaciones y los enfrentamientos entre simpatizantes oficialistas y fuerzas opositoras. Esta jornada de marchas y contramarchas derivó nuevamente en disturbios y registró numerosos detenidos y tres fallecidos.
 
Las razones de la protesta van desde demandas en salud, vivienda, y abastecimiento de bienes de primera necesidad, hasta reclamos por la inseguridad. Sin embargo, estas jornadas de protesta, al margen de sus razones verbalizadas, de sus consignas en muchos casos limitadas, fueron crítica práctica y apuntaron a la destrucción de los símbolos e instituciones del Estado y del Capital. Hubo embestidas contra sedes de partidos políticos, tanto opositores como oficialistas; ataques a sedes de instituciones estatales y patrullas del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (principal órgano estatal de investigaciones penales). Además se registraron arremetidas al Hotel Venetur (de propiedad estatal) y asedios prolongados a la cadena de televisión pública Compañía Anónima Venezolana De Televisión (VTV). En el estado de Táchira hubo ataques contra la sede de la Fundación de la Familia Tachirense, en el municipio de Chacao contra el Banco Provincial y el Banco Venezuela, y en Barquisimeto, a la sede de la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (CANTV).
 
Ninguno de estos ataques es salvaguarda frente a la posible codificación de las protestas hacia el pedido de reformas parciales, pero las movilizaciones, guarimbas (barricadas urbanas) y arremetidas por parte del proletariado de la región venezolana denuncian con palos y furia, una vez más, la inhumanidad del Capital, de su faceta democrática y sus partidos, de sus medios de comunicación, su brazo represivo y sus fuerzas de choque. Esta y otras revueltas de las que somos testigos, que suceden en diversos lugares y aparentemente por motivos distintos, si bien muchas veces resultan efímeras, poseen una conexión de intereses y de lucha contra la explotación, como la respuesta más humana contra la civilización, como crítica práctica contra el orden y sus representantes, como muestra del intento de imponer las necesidades humanas frente a las del mercado y las relaciones sociales capitalistas.
 
Y, como siempre, cuando la zanahoria se pudre... sólo queda repartir palos. El brazo armado del Estado, defiende con prisión y tortura su incuestionable propiedad privada. La represión por parte de la GNB, la SEBIN y grupos paramilitares logra disolver algunas protestas al mismo tiempo que desata otras. La represión sin miramientos, la detención y tortura, la militarización del estado de Táchira, los allanamientos ilegales, entre otras, han sido la respuesta preferida del Estado venezolano a esta serie de ataques y revueltas, dejando como saldo hasta el momento 36 muertos, cerca de 400 heridos y 1600 detenidos.

Ahora que la perorata del poder popular muestra su verdadera cara, es momento de insistir en lo espontáneo de estas revueltas, y en que más allá de las consignas en  las que se verbalicen, son rupturas de la cotidianidad, expresión quizás parcial e incompleta, de una clase agotada de vivir y morir aplastada, ajena a su humanidad. Las diversas formas en las que estas condiciones se presentan bajo los diversos Estados no son más que las diversas caras de nuestra condición de proletarios. Comprender esto es comprender que somos parte del mismo ser, en tanto compartimos las mismas miserables condiciones de existencia y portamos la capacidad para terminar esta situación.
 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nos interesa el debate, la confrontación de ideas y el disenso. Pero si tu comentario es sólo para descalificaciones sin argumentos, o mentiras falaces, no será publicado. Hay muchos sitios del gobierno venezolano donde gustosa y rápidamente publican ese tipo de comunicaciones.

Ser gobernado es...

Charla: El Anarquismo en América Latina

Seguidores

Etiquetas

10deLuluncoto 18 años El Libertario 1º de Mayo 27 de febrero 4 de febrero @kRata (comic) APPO Aana Wainjirawa Abdicación del rey de España Aborto Abstención Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat Acampadas Accion directa no violenta Acción Directa Autogestiva Acción Ecológica Acción Libertaria Acuerdo Venezuela China Agustín García Calvo Alan Furth Alan Moore Albert Camus Alberto Acosta Alcedo Mora Alejandro Álvarez Alentuy Alexander Luzardo Alfonso "el Set@" Alfredo Bonanno Alfredo Vallota Alternativa Antimilitarista Alto costo de la vida Alvaro García Linera Alí Moshiri Alí Primera Alí Rodríguez Araque Amador Fernández-Savater Aministía Internacional Amnistía Internacional Amnistía Internacional Venezuela Amor Amor y Rabia América Latina Américo Alejandro Balbuena Anarquismo en América Latina Anarquismo en México Anarquismo en Venezuela Anarquismo es movimiento Anarquismo social Anarquismo y Postestructuralismo Anarquismo y política Anarquistas contra el muro Anarquistas de Temuco Andreas Speck Antonio Ledezma Antonio Pasquali Antonio Serrano Antulio Rosales Anzoátegui Archivo Histórico del Anarquismo en Venezuela Armando Chaguaceda Armando Guerra Armando Investiga Armando la Resistencia Asier Guridi Asilo y refugio Autonomía Barquisimeto Bernhard Heidbreder Buenaventura Durruti Buenos Aires CNT CORPOELEC Cambiar el mundo sin tomar el poder Cambio Climático Campaña contra la Criminalización del Anarquismo Carlos Crespo Carlos Crespo Flores Carmen García Guadilla Casa de la Mujer "Juana la Avanzadora" de Maracay Casa de la Mujer Juana la Avanzadora de Maracay Centro de Derechos Humanos UCAB Civetchi Coalicion Anarquista y Libertaria de Porto Alegre Coalición Venezolana de Organizaciones LGBTI Colombia Comites de Defensa de la Revolución Comitê Popular da Copa 2014 Concretera la carlota Cooperativismo Correo A Criminalización de los pueblos indígenas Cuba Libertaria Cuba Libertaria 22 Daniel Ortega Daniel Pinos Douglas Bravo EZLN Ejército Venezolano Eliseo Reclus Emma Goldman Enfermedad Hugo Chávez Erick Benítez Escritos de Domingo Alberto Rangel Espacio Público Estado y corrupción en Venezuela Estado y economía en Venezuela Esteban Emilio Mosonyi Europa Eva Golinger Evo Morales FARC FIFA Fanzine Exilio Interior Federación Anarquista Centroamericana y Caribeña Federación Anarquista Centroamericana y del Caribe Federación Anarquista de México Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) Felipe Pérez Martí Feria del Libro Independiente y Autogestionario Feria del libro anarquista Ferrominera Ferrominera Orinoco Filosofía Filosofía en la Ciudad Francisco Flaco Prada Frente Clasista Argimiro Gabaldón GLBIT Gadafi Galsic Genocidio Global Voices Grupo de Estudio y Trabajo Jesús Alberto Márquez Finol Guardia Nacional Bolivariana Guardianas de Chávez Gustavo Godoy Gustavo Rodríguez Género Heinz Dieterich Henrique Capriles Historia de Venezuela Homofobia Humano Derecho Humberto Decarli Humberto Márquez Humor Indígenas Venezuela Informe situación indígenas en Venezuela Inseguridad Ciudadana en Venezuela Instituto de Prensa y Sociedad Venezuela Irak Iris Varela Isbel Díaz Torres Israel James C. Scott Javier Gárate John Holloway Jorell Meléndez Jorge Videla Jornadas Magonistas Jose Manuel Delmoral Jose María Korta José María Korta José Quintero Weir José Rafael López Padrino Juan Carlos La Rosa LEEME CARACAS Laura Vicente Lexys Rendón Ley Antiterrorista Liber Forti Luis Carlos Díaz Luis Fuenmayor Toro Luis Rafael Escobar Ugas Luis Reyes Reyes Líber Forti MOC Madres de Plaza de Mayo Madrid Manuales Manuel Castells Marc Saint-Upéry Marcela Masperó Marea Socialista Mario Antonio López María Esperanza Hermida Masacre de Cantaura Masacre de El Amparo Masacre de Haximú Masacre de Loma de León Masacre de Monte Oscuro Masacre de Uribana Mercosur Mijaíl Martínez Misiones Sociales Mujeres Libres Mundial de Fútbol 2014 Mérida Nicaragua Nicolás Maduro Niñas y Adolescentes Nu-Sol Observatorio Venezolano de Conflictividad Social Occupy Wall Street Octavio Alberola Organización Nelson Garrido Origen de las Fuerzas Armadas en Venezuela Orlando Chirino Pablo Hernández Parra Paquete económico Parque Verde La Carlota Pedro Pablo Peñaloza Pelao Carvallo Periódico Apoyo Mutuo Periódico El Amanecer Periódico El Libertario Picnic urbano Policía Nacional Bolivariana Punk Latinoamericano Quiteria Franco Rafael Ramírez Rafael Uzcátegui Raisa Urribarri Ramón Carrizales Ramón Rodríguez Chacín Ramón Álvarez Raúl Zibechi Red Latinoamericana Antimilitarista Red Protagónica Observatorio Crítico (OC) de la Revolución Cubana Red por los Derechos Humanos de Niños Regeneración Radio Represión en Cuba Repsol YPF Revolución ciudadana Roberto Yépez Rodolfo Montes de Oca Rodolfo Rico Roger Cordero Lara Rubèn González Rubén González Rusia Sacudón San Cristóbal Santiago de Chile Servicio Militar Obligatorio Sidor Sierra de Perijá Simón Rodríguez Porras Soberanía energética bolivariana Sociedad Homo et Natura Sociedad Homoetnatura Sofía Comuniello Sofía Esteves Subcomandante Marcos Taller Libertario Alfredo López Tamoa Calzadilla Tarek William Saab Testimonio represión Testimonios de la revolución cubana Todo por Hacer Tomás Ibáñez Trabajadores de la Chrysler Transexuales Transfobia Transformando información en acción Transparencia Venezuela Transportes Camila Trasnacionales Tribunal Supremo de Justicia Turquía Twitter UBV UCV ULA UNETE UNEY Uribana Uruguay Valles del Tuy Vaticano Venevisión Venezuela bolivariana Venezuela protests in February 2014 Vivienda Vladimir Aguilar Víctor Muñoz Williams Sanguino Wladimir Pérez Yaracuy Yendri Sánchez Zaida García Zapatistas Zara Zulia `Sabino Romero abajo los muros de las prisiones abolicionismo abstencion abstención electoral abuso militar en Venezuela abuso policial abuso sexual niños acampada acción directa anarquista actividades activismo actualidad del anarquismo adecos chavistas agresiones en Venezuela agresiones a sindicalistas en Venezuela agroecología alternativa amor libre anarchico anarchism anarchism kurdistan anarchism venezuela anarcofeminismo anarcopunk venezuela anarquismo a la venezolana anarquismo básico anarquismo caracas anarquismo en Argentina anarquismo en Francia anarquismo en Perú anarquismo en Uruguay anarquismo en barquisimeto anarquismo en rusia anarquismo hoy anarquismo ilegalista anarquismo suiza anarquismo venezuela anarquismo vs. Estado anarquismo y comunicación anarquismo y cárceles anarquismo y derecho anarquismo y ecología anarquismo y educación anarquismo y literatura anarquismo y luchas sociales anarquismo y marxismo anarquismo y nacionalismo anarquismo y planificación urbana anarquismo y religión anarquismo y violencia anarquismo zulia anarquistas anarquistas caracas anarquistas de Alemania anarquistas de Brasil anarquistas de Chile anarquistas de Cuba anarquistas de México anarquistas de Turquía anarquistas en Bolivia anarquistas en Colombia anarquistas en Costa Rica anarquistas en Cuba anarquistas en El Salvador anarquistas en Paraguay anarquistas en Venezuela anarquistas presos anarquistas solidarios con los yukpa anarquistas ucv anarquistas y prisiones anonymous venezuela antiimperialismo antimilitarismo antimilitarismo anarquista antropología análisis análisis anarquista sobre Venezuela análisis asamblea nacional análisis conflicto con Colombia análisis de izquierda Venezuela análisis de la revolución bolivariana análisis económico análisis reformas en Cuba análisis sobre Venezuela apagones apoyo a El Libertario apoyo internacional al chavismo apoyo internacional al madurismo armamentismo arte callejero arte y anarquismo artistas asesinato de estudiantes asesinatos de manifestantes ataques contra defensores de derechos humanos ataques contra defensores de derechos humanos en Venezuela ataques contra el movimiento anarquista ataques contra el movimiento popular en Venezuela ataques libertad de expresión autodefensa autogestion autogestión autonomía de los movimientos sociales autonomía universitaria autoritarismo burocratico en Cuba biblioteca anarquista bicentenario bakunin bicicletas biciescuela urbana bienes comunes brutalidad policial calentamiento global cambio social capitalismo y medio ambiente caracas chavismo y religiosidad popular chile ciberactivismo ciclismo urbano ciclo guerrilla urbana ciencia y tecnología en Venezuela comercio de armas comic comics comida vegetariana compra de armas concretera caracas concretera de chuao conflicto universitario conflicto yukpa consecuencias ambientales explotación petrolera en Venezuela contaminación PDVSA contaminación ambiental cooptación de movimientos sociales cooptación medios alternativos Venezuela coyuntura mexicana 2012 coyuntura venezolana 2010 coyuntura venezolana 2012 coyuntura venezolana 2013 coyuntura venezolana 2014 coyuntura venezolana 2015 coyuntura venezolana 2016 criminalización de la protesta en Colombia criminalización de la protesta en Venezuela crisis agropecuaria en Venezuela crisis economica venezuela crisis económica en Venezuela crítica anarquista al marxismo crítica de izquierda al chavismo críticas de izquierda al madurismo críticas revolucionarias a Rafael Ramírez deforestación delimitación de tierras indígenas demarcación de territorios indígenas demarcación de tierras en Venezuela deporte y anarquia deporte y capitalismo derecho a la manifestación derecho a la protesta desabastecimiento desaparecidos en Argentina desaparecidos en México desaparecidos en Venezuela desarrollo científico-tecnológico desencanto en el chavismo despidos injustificados detenciones difusión anarquista ecologismo ecologismo en Venezuela economía educación en Venezuela endeudamiento equidad de género en Venezuela extractivismo falso socialismo fascismo futbol brasil globalizacion en Venezuela golpe de Estado en Venezuela hacktivismo hiperinflación historia del anarquismo homicidios ilustraciones imágen El Libertario indigenas ecuador indigenas en venezuela individualismo y anarquismo industria forestal en Chile industria petrolera indìgenas y revolución bolivariana indígenas en Argentina indígenas en Bolivia indígenas en Brasil indígenas en México indígenas en Perú indígenas en Venezuela indígenas presos en Venezuela inflación en Venezuela informática libertaria izquierda antiautoritaria en Cuba izquierda antichavista izquierda en Venezuela jornadas de diversidad sexual la Justicia y los Derechos Humanos legado del chavismo liberacion animal liberación animal liberación humana libertad Bernhard Heidbreder libertad a los presos anarquistas libertad de expresión libertad de expresión en Venezuela libertad para detenidos en Lulea los Salarios y los Sindicatos lucha indígena en Colombia lucha indígena en Venezuela lucha revolucionaria lucha socio-ambiental luchas ambientales Venezuela luchas de los pueblos indígenas luchas de los trabajadores luchas de los trabajadores Venezuela luchas de mujeres luchas estudiantiles luchas indígenas en Venezuela luchas obreras luchas populares en Venezuela luciano pitronello madurismo maestros manifestaciones manifestaciones en Venezuela manipulación mediática manipulación religiosa mario gonzalez masa crítica masacre de San Vicente medio ambiente medios comunitarios y alternativos de Venezuela medios de transporte alternativos megaminería mineria en Venezuela minería minería en Venezuela movilizacion en la planta muerte de neonatos en Venezuela mujeres anarquistas narcotráfico neoliberalismo nicolas maduro no a la concretera no a la extradicion de Bernhard Heidbreder no a las corridas de toros objeción de conciencia organizacion nelson garrido paramilitarismo paro universitario patriarcado patriotismo pelea de almohadas periodico Bandera Negra periódico CNT periódico anarquista periódicos petróleo venezolano poder y política en Latinoamérica poder y política en Venezuela poesía libertaria polarización en Venezuela policías corruptos en Venezuela prensa anarquista preso anarquista presos anarquistas presos políticos en Venezuela prision venezuela prisiones en venezuela proceso bolivariano producción agrícola protesta creativa protesta pacífica protestas contra el Mundial 2014 protestas en venezuela proyecto de reforma de la Ley de Conscripción y Alistamiento Militar práctica anarquista pueblos originarios pugnas internas del chavismo punk veneziuela rebelion en venezuela recursos red Observatorio Crítico relaciones Cuba-EE.UU. relaciones de Venezuela con China relaciones de Venezuela con Colombia relaciones de Venezuela con Cuba relaciones de Venezuela con U$A relaciones entre la banca y chávez represion en Venezuela represion policial en Venezuela represión represión antianarquista represión en Colombia represión en Venezuela represión policial resistencia indígena resistencia venezuela revista AL MARGEN revolución bolivariana robert serra salario en venezuela salario mínimo en Venezuela sanciones sancocho secuestro seguridad industrial semana pro presos anarquistas 2014 sexismo sexualidad libre sicariato sindicalismo situación agraria latinoamericana situación de la salud situación de los trabajadores en Venezuela situación del periodismo en Venezuela situación del sindicalismo en Argentina situación del sindicalismo en Venezuela situación político-social en Brasil situación político-social en la península ibérica situación político-social mexicana situación venezolana situation in Venezuela 2014 soberanía alimentaria en Venezuela software libre solidaridad con Cuba tercerización en Venezuela terrorismo terrorismo cotidiano terrorismo de Estado en Colombia toma yukpa del TSJ torturas en Venezuela totalitarismo trabajadores del Estado trabajadores en Argentina transición transnacionales chinas turquia tweets anarquistas universidad central de venezuela utopía vegetarianismo venezuela vidas anarquistas viento sin fronteras vigilia frente al TSJ violaciones a los derechos humanos violencia contra la mujer violencia contra niños zona temporalmente autónoma Ángel Cappelletti ética y práctica médica