Por Carlos Solero
En el Nº 447 dela Revista Ñ Christian Ferrer realiza una serie de
consideraciones que incitan a reflexionar.
En el Nº 447 de
¿Para que sirven las utopías? Como alguna vez dijeron el
cineasta Fernando Birri y Eduardo Galeano respectivamente para caminar, aunque
aparezcan como lejanas en el horizonte ciertas personas en este mundo como los
militantes anarquistas estamos convencidos de la necesidad de transformar las
sociedades distópicas y crueles del presente en algo distinto.
Ahora bien, esta vocación de cambio no surge del dogmatismo,
sino de analizar lo inviable para los seres humanos de los sistemas económicos,
sociales y políticos del presente, arraigan en la atenta observación de las
diversas realidades de revuelta e insumisión contra los despotismos en
múltiples latitudes.
La historia no sólo no ha terminado como afirmaba
F.Fukuyama, sino que las últimas décadas han demostrado que tal como afirmaba
el geógrafo anarquista Eliseo Reclús: “La anarquía es la más alta expresión del
orden”.
Tal es el caos reinante generado por el sistema del
capitalismo que es indispensable para la supervivencia de la especie humana
transformar la sociedad antes que el paroxismo productivista y el consumismo la
aniquile, con centrales nucleares, derrames de petróleo, deforestación, etc
Como escribió el filósofo C.Castoriadis es preciso recrear el
imaginario social emancipador.
Los anarquistas, no somos el pasado, muchos de los
postulados difundidos durante décadas han generado y potenciado a movimientos
sociales actuales y presentes: la conciencia ecológica, el rechazo al servicio
militar, las luchas por la emancipación de las mujeres, la búsqueda de métodos
educativos no autoritarios, etc.
La utopía anarquista del socialismo en Libertad, no es
quimérica, es decir un bello sueño de líricos sino un camino a recorrer, que
para algunos parece imposible o impensable y para otros como nosotros
indispensable, para no perecer como especie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos interesa el debate, la confrontación de ideas y el disenso. Pero si tu comentario es sólo para descalificaciones sin argumentos, o mentiras falaces, no será publicado. Hay muchos sitios del gobierno venezolano donde gustosa y rápidamente publican ese tipo de comunicaciones.