Redacción
Una "nota informativa" redactada por el medio estatal YVKE Mundial, y republicada gozosamente por la "cartelera del movimiento popular" Aporrea, es redactada en un estilo que haría feliz a la cúpula conservadora del Opus Dei. El texto versa sobre la solicitud de Tamara Adrián, conocida activista transgénero hoy electa diputada, para que se le reconozca su identidad femenina, en la línea de lucha por la identidad que caracteriza a todo el movimiento mundial GLBTI y que debería tener el apoyo de las fuerzas progresistas del mundo.
Citamos parte de la nota: "La Sala Constitucional del Tribunal estudiará el reconocimiento legal a la nueva situación sexual (físico-psico-social) de Tomás Mariano Adrian Hernández, quien se practicó una operación para adoptar genitales femeninos, según se lee en la sentencia N° 10 emitida este 1° de marzo. A causa de esa nueva situación sexual, esta persona adoptó el acrónimo de Tamara Adrian y es actualmente diputado opositor en la Asamblea Nacional". Valga acotar que la leyenda fotográfica de Aporrea la identifica como miembro del partido "de ultraderecha" Voluntad Popular. Si milita en un partido de ultraderecha, nos dice Aporrea, entonces Tamara Adrián sería "de ultraderecha". Y con desviaciones además. Fijense nomás en el título: "TSJ evalúa cambiar el nombre a diputado de la burguesía".
Pero sigamos el texto escrito y republicado por supuestos "revolucionarios": "Sostiene que a pesar de haberse sometido a tal transformación supuestamente "se encuentra privada" en el ejercicio de sus derechos constitucionales “debido a que desde el punto de vista legal aparece en todos los registros públicos como varón y su nombre legal”. Para rematar, YVKE y Aporrea apelan al argumento favorito de los conservadores religiosos del planeta: La amenaza a la familia tradicional. Leamos: "La Sala Constitucional acordó “la no reserva del expediente” pues considera que “los hijos de la parte actora (Adrian Hernández) ya han alcanzado la mayoría de edad, por lo que la mencionada reserva tampoco es necesaria para preservar los derechos de los niños”.
El que tenga ojos que lea. Los paladines de la revolución intergalactiva internacional "salen del closet" para ventilar su homofobia. Y en esto queremos ser suficientemente claros: Una cosa es cuestionar el pensamiento político de Voluntad Popular y de Tamara Adrián y otra, intentar banalizar y criminalizar una de las luchas históricas del movimiento sexodiverso en todo el planeta: El derecho a tener la identidad y el género que se desee.
El tono del artículo habla por si sólo del conservadurismo madurista-cabellista, en el cual el sector evangélico ha venido ocupando diferentes espacios para detener las reivindicaciones de la comunidad GLBTI venezolana, las cuales han venido conquistándose progresivamente en el resto de los países de la región.