A 13 meses de la muerte de Adriana Urquiola: periodista amenazada y responsable libre
Félix Azuaje
Ya se cumplió un año del asesinato de la intérprete de señas Adriana Urquiola, y aún su crimen continua impune. Urquiola fue asesinada con dos disparos la noche del domingo 23 de marzo en la urbanización Los Nuevos Teques, justos cuando descendía de un vehículo por puesto, ya que una protesta impedía la circulación de carros por el sector.
Adriana, quien para el momento tenía siete meses de gestación, tuvo que descender del colectivo al igual que otras personas, entre ellas Rosalba Pérez Ibañez. No tendrían sino unos minutos de haber descendido del transporte y buscando –cada quien por su lado- la forma de saltar los obstáculos y poder llegar a sus hogares, cuando se escucharon los disparos que se alojarían en el cuerpo de estas dos damas, quienes entre el tumulto de la manifestación nocturna habrían caído al suelo heridas de bala.
Los testigos indicaron que vieron como de una camioneta rústica descendió un hombre pistola en mano y disparó, porque al sujeto no lo dejaban pasar. Mientras las mujeres heridas eran atendidas, la policía de Miranda fue alertada de la situación y comenzó la persecución de esta camioneta. Una persona tomó nota de las placas y fue entonces cuando se conocería la identidad del hombre que es señalado como el autor material del hecho. Yhonny Bolívar.
La investigación realizada por medios de comunicación reza que Bolívar, quien tenía su residencia en San Antonio de Los Altos a unos diez minutos de los Nuevos Teques, lugar donde ocurre el hecho, llamó desde su casa a la Policía Nacional Bolivariana, ya que poseía un carnet que lo acreditaba como Comisionado de este organismo de seguridad. Pidió que una comisión lo buscara en su hogar, ya que tenía la información de que una mujer supuestamente fue tiroteada en la manifestación.
Cuando llegó se identificó como funcionario de la PNB y se enteró de todos los pormenores del suceso. En horas de la mañana el Cicpc realizó las diligencias pertinentes y a través de la placa de la camioneta, que fue anotada la noche del crimen, llegaron hasta la residencia de Bolívar. Allí se volvió a identificar como funcionario y dijo que había prestado la camioneta a su hermano.
En una entrevista concedida al diario El Nacional, Yhonny Bolívar admitió haber sido el responsable del hecho y dijo que había disparado al aíre. Según la planimetría, una bala dio en un poste y luego se alojó en la cabeza de Urquiola. También reconoció que en su momento estuvo preso por extorsión, más ratificó que no trabajó como escolta de la ministra de Asuntos Penitenciarios Iris Varela.
Jenny Oropeza del diario 2001, es una de las periodistas de sucesos que le ha dado cobertura amplia y detallada a este caso, situación que le ha costado varias amenazas de muerte.
Oropeza manifiesta que una vez que Bolívar tuvo en cuenta que las autoridades estaban tras de él, se fugó y en algún momento llegó a salir del país.
La comunicadora social dijo que sus fuentes le han informado sobre la presencia actual de Bolívar en el estado Lara, de donde es oriundo.
Por su parte, la madre de Urquiola, Manuela Pérez, ha emprendido una campaña titánica en la que ha logrado que Bolívar aparezca entre los más buscados en Latinoamérica.
Según la madre de la víctima, Bolívar anda en la calle de manera impune. Una de sus últimas apariciones supuestamente fue en un reconocido hotel de Margarita el 31 de diciembre.
Recientemente la comunicadora social Jenny Oropeza ha sido citada nuevamente a la Fiscalía para declarar en torno al caso y continúan las amenazas en su contra, mientras que Bolívar sigue libre.
[Tomado de http://800noticias.com/un-ano-de-la-muerte-de-adriana-urquiola-periodista-amenazada-y-responsable-libre.]
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Mamá de Adriana Urquiola pide a las autoridades que detengan a Yonny Bolívar
Ronna Rísquez
Mientras que Manuela Pérez, mamá de Adriana Urquiola, espera justicia, Yonny Bolívar, el hombre que mató a su hija embarazada, se exhibe “en Barquisimeto y Margarita con camionetas de lujo y acompañado de hombres armados y algunas chicas de la farándula”, asegurán personas allegadas al prófugo.
A un año del asesinato de Adriana Urquiola, la joven de 28 años de edad, que se desempeñaba como intérprete de señas de Venevisión, el homicida no ha sido detenido. Aunque el hombre que disparó la noche del 23 de marzo de 2014 contra manifestantes en el sector Los Nuevos Teques, por donde pasaba Urquiola, fue identificado casi de inmediato como Yonny Bolívar, y días después confesó su crimen en una entrevista con la periodista Adriana Chirinos, publicada el 30 de marzo por El Nacional.
Hay una orden de captura contra de Bolívar y su nombre fue incluido en la alerta roja de Interpol, pero estas gestiones no han sido de mucha utilidad, porque según algunos allegados al hombre conocido como el “capitán” Bolívar se mueve con libertad en la capital del estado Lara, donde posee importantes propiedades. En algunas ocasiones ha sido visto en Aruba y en la isla de Margarita.
Esta no es la primera vez que el “Capitán Bolívar” evade la justicia. Aunque no están claras, sus relaciones con el poder lo han ayudado en su vida delictiva. El día que mató a Adriana Urquiola, de 28 años de edad, Yonny Bolívar portaba una credencial de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que lo identifica como comisionado. También la presentó cuando fue citado a declarar al Cicpc.
Félix Azuaje
Ya se cumplió un año del asesinato de la intérprete de señas Adriana Urquiola, y aún su crimen continua impune. Urquiola fue asesinada con dos disparos la noche del domingo 23 de marzo en la urbanización Los Nuevos Teques, justos cuando descendía de un vehículo por puesto, ya que una protesta impedía la circulación de carros por el sector.
Adriana, quien para el momento tenía siete meses de gestación, tuvo que descender del colectivo al igual que otras personas, entre ellas Rosalba Pérez Ibañez. No tendrían sino unos minutos de haber descendido del transporte y buscando –cada quien por su lado- la forma de saltar los obstáculos y poder llegar a sus hogares, cuando se escucharon los disparos que se alojarían en el cuerpo de estas dos damas, quienes entre el tumulto de la manifestación nocturna habrían caído al suelo heridas de bala.
Los testigos indicaron que vieron como de una camioneta rústica descendió un hombre pistola en mano y disparó, porque al sujeto no lo dejaban pasar. Mientras las mujeres heridas eran atendidas, la policía de Miranda fue alertada de la situación y comenzó la persecución de esta camioneta. Una persona tomó nota de las placas y fue entonces cuando se conocería la identidad del hombre que es señalado como el autor material del hecho. Yhonny Bolívar.
La investigación realizada por medios de comunicación reza que Bolívar, quien tenía su residencia en San Antonio de Los Altos a unos diez minutos de los Nuevos Teques, lugar donde ocurre el hecho, llamó desde su casa a la Policía Nacional Bolivariana, ya que poseía un carnet que lo acreditaba como Comisionado de este organismo de seguridad. Pidió que una comisión lo buscara en su hogar, ya que tenía la información de que una mujer supuestamente fue tiroteada en la manifestación.
Cuando llegó se identificó como funcionario de la PNB y se enteró de todos los pormenores del suceso. En horas de la mañana el Cicpc realizó las diligencias pertinentes y a través de la placa de la camioneta, que fue anotada la noche del crimen, llegaron hasta la residencia de Bolívar. Allí se volvió a identificar como funcionario y dijo que había prestado la camioneta a su hermano.
En una entrevista concedida al diario El Nacional, Yhonny Bolívar admitió haber sido el responsable del hecho y dijo que había disparado al aíre. Según la planimetría, una bala dio en un poste y luego se alojó en la cabeza de Urquiola. También reconoció que en su momento estuvo preso por extorsión, más ratificó que no trabajó como escolta de la ministra de Asuntos Penitenciarios Iris Varela.
Jenny Oropeza del diario 2001, es una de las periodistas de sucesos que le ha dado cobertura amplia y detallada a este caso, situación que le ha costado varias amenazas de muerte.
Oropeza manifiesta que una vez que Bolívar tuvo en cuenta que las autoridades estaban tras de él, se fugó y en algún momento llegó a salir del país.
La comunicadora social dijo que sus fuentes le han informado sobre la presencia actual de Bolívar en el estado Lara, de donde es oriundo.
Por su parte, la madre de Urquiola, Manuela Pérez, ha emprendido una campaña titánica en la que ha logrado que Bolívar aparezca entre los más buscados en Latinoamérica.
Según la madre de la víctima, Bolívar anda en la calle de manera impune. Una de sus últimas apariciones supuestamente fue en un reconocido hotel de Margarita el 31 de diciembre.
Recientemente la comunicadora social Jenny Oropeza ha sido citada nuevamente a la Fiscalía para declarar en torno al caso y continúan las amenazas en su contra, mientras que Bolívar sigue libre.
[Tomado de http://800noticias.com/un-ano-de-la-muerte-de-adriana-urquiola-periodista-amenazada-y-responsable-libre.]
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Mamá de Adriana Urquiola pide a las autoridades que detengan a Yonny Bolívar
Ronna Rísquez
Mientras que Manuela Pérez, mamá de Adriana Urquiola, espera justicia, Yonny Bolívar, el hombre que mató a su hija embarazada, se exhibe “en Barquisimeto y Margarita con camionetas de lujo y acompañado de hombres armados y algunas chicas de la farándula”, asegurán personas allegadas al prófugo.
A un año del asesinato de Adriana Urquiola, la joven de 28 años de edad, que se desempeñaba como intérprete de señas de Venevisión, el homicida no ha sido detenido. Aunque el hombre que disparó la noche del 23 de marzo de 2014 contra manifestantes en el sector Los Nuevos Teques, por donde pasaba Urquiola, fue identificado casi de inmediato como Yonny Bolívar, y días después confesó su crimen en una entrevista con la periodista Adriana Chirinos, publicada el 30 de marzo por El Nacional.
Hay una orden de captura contra de Bolívar y su nombre fue incluido en la alerta roja de Interpol, pero estas gestiones no han sido de mucha utilidad, porque según algunos allegados al hombre conocido como el “capitán” Bolívar se mueve con libertad en la capital del estado Lara, donde posee importantes propiedades. En algunas ocasiones ha sido visto en Aruba y en la isla de Margarita.
Esta no es la primera vez que el “Capitán Bolívar” evade la justicia. Aunque no están claras, sus relaciones con el poder lo han ayudado en su vida delictiva. El día que mató a Adriana Urquiola, de 28 años de edad, Yonny Bolívar portaba una credencial de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que lo identifica como comisionado. También la presentó cuando fue citado a declarar al Cicpc.
Fiscal interesada en el caso
Bolívar ya había estado involucrado en delitos como robo y usurpación de identidad y salió en libertad con facilidad. Pero el hecho más grave ocurrió en marzo de 2004, cuando fue condenado a 22 años de prisión por un tribunal del estado Lara por secuestro, ocultamiento de armas de guerra y usurpación de título militar. En abril de 2005, la titular del juzgado 5to de Lara, Menfis Álvarez Núñez, le otorgó la libertad. Este beneficio le fue revocado y permaneció en prisión hasta 2012, cuando obtuvo la libertad sin cumplir la sentencia de 19 años de cárcel.
Mientras estuvo tras las rejas, Bolívar se relacionó con los pranes que controlaban Tocuyito, Tocorón y Vista Hermosa. Se relacionó con mujeres de la farándula, con algunas de las cuales tuvo relaciones sentimentales. “En Twitter utiliza el usuario @The_lord_jedi y solo se identifica como Eduardo Bolívar C. Hasta el jueves en la tarde contaba con 361 seguidores y colgaba fotografías en que se exhibía abrazado con personajes públicos como las actrices Susej Vera, Myriam Abreu (conocida como “La Barbie”) y el ex pelotero Ugueth Urbina, entre otras figuras”, escribió la periodista Maolis Castro en un reportaje publicado en El Nacional, el 6 de abril de 2014.
A pesar de estos obstáculos, Manuela Pérez confía en que Bolívar será detenido y se hará justicia en el caso de su hija. “Esta es mi misión. Yo voy a seguir luchando para que ese hombre que es un delincuente, acostumbrado a matar y salirse con la suya, sea detenido. Esta es la única manera en que podré tener paz”, dijo.
Manuela Pérez se ha apoyado en las redes sociales y en campañas ingeniosas para exigir, a su manera y en solitario, justicia por la muerte de su hija y su nieto Alex (Adriana tenía siete meses de embarazo cuando fue asesinada). “Esto me ha ayudado a drenar. Tengo mi cuenta en Twitter @manuelita1504 y por ahí publicó cosas y la gente me hace comentarios. También hicimos una campaña de cartas de amor para Adriana, y la gente ha mandado cosas muy lindas. Lo otro que he recibido son dibujos de los niños de la Unidad Educativa Especial Bolivariana Los Teques, donde Adriana se vinculo con el mundo del lenguaje de señas”, explicó.
Hace aproximadamente un mes el caso pasó a manos de la fiscal nacional 59°, Marisol Zacarías, en vista de la actitud poco diligente del fiscal 1º de Miranda, Jimmy Hernández. La semana pasada, Manuela Pérez fue recibida por la fiscal Luisa Ortega Díaz, quien expresó su interés por resolver el crimen. Y recientemente la fotografía de Yonny Bolívar aparece entre los criminales requeridos por Interpol. “Son pequeños pasos. Son cosas en las que hemos ido avanzando”, indicó Pérez, quien cree en la justicia y agradece la preocupación que han mostrado las autoridades y algunos miembros del gobierno por el caso de su hija.
[Tomado de http://runrun.es/rr-es-plus/194408/mama-de-adriana-urquiola-pide-a-las-autoridades-que-detengan-a-yonny-bolivar.html.}
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